Sociedad

Un padre arroja a su hijo de 7 años por un acantilado para enseñarle una lección sobre cómo enfrentar los miedos

El video, publicado en Instagram el domingo 13 de julio, ya acumula más de 3,5 millones de visualizaciones

Un padre arroja a su hijo de 7 años por un acantilado para enseñarle una lección sobre cómo enfrentar los miedos
Un padre arroja a su hijo de 7 años por un acantilado para enseñarle una lección sobre cómo enfrentar los miedosThe Bucket List Family/Instagram

Garrett Gee, conocido influencer y creador del proyecto familiar "The Bucket List Family", ha generado gran controversia en redes sociales tras publicar un video en el que lanza a su hijo de 7 años desde un acantilado con el objetivo de ayudarlo a superar sus miedos.

El video, publicado en Instagram el domingo 13 de julio, ya acumula más de 3,5 millones de visualizaciones. En él se ve a Gee junto a su hijo Calihan sobre una formación rocosa en el lago Powell, donde aparentemente lo motiva a dar el salto al agua. Finalmente, el padre lo toma en brazos y lo arroja al vacío. Aunque el niño gritó durante la caída, emergió con una sonrisa en el rostro. Garrett se lanzó detrás de él y lo saludó en el agua con un gesto de aprobación.

El niño fue recibido con aplausos y vítores de quienes observaban desde la distancia

Gee acompañó el video con una larga descripción en la que explica su decisión. Aclaró que su publicación no debe tomarse como consejo de crianza, ni es algo que recomiende imitar. También aseguró que esta no es una táctica que haya empleado con sus otros dos hijos.

“Cada hijo es muy diferente, así que la forma en que los educamos, disciplinamos y enseñamos a saltar desde acantilados también lo es. La primera prioridad es la seguridad. La segunda, aprender que uno puede hacer cosas difíciles. La tercera, divertirse”, escribió.

En cuanto a la seguridad, detalló que eligieron un acantilado cuya altura consideraban segura para Calihan. Según explicó, el verdadero peligro habría sido que su hijo dudara, no saltara lo suficientemente lejos y cayera contra la roca.

Para evitar ese riesgo, Gee optó por lanzarlo él mismo. Según indicó, el niño quería saltar, pero no se sentía con suficiente confianza. “Eventualmente, una cría de águila necesita salir del nido… o ser lanzada… y aprender que puede volar”, afirmó.

Cerró su mensaje con una advertencia: “Cuidado: enseñar a tus hijos a ser valientes puede volverse en tu contra cuando crecen y empiezan a saltar desde alturas que ni tú te atreves. ¡Tengan cuidado! ¡Pueden hacer cosas difíciles! ¡Diviértanse!”

El video desató una oleada de reacciones en la sección de comentarios. Algunos usuarios cuestionaron la decisión, mientras que otros la defendieron.

“Pregunta sincera, sin juzgar. ¿Él sabía que iba a ser lanzado?”, preguntó un usuario. Gee respondió: “Sí. Tenía la opción de bajar escalando, saltar solo o que yo lo lanzara. Eligió ser lanzado. Aun así, fue aterrador para él. También para mí, porque tenía que asegurarme de que no se aferrara a mí y golpeara contra la roca, y también de que cayera de pie al agua. Fue complicado, pero creo que eso forma parte del trabajo de ser papá”.

Otros comentarios fueron más críticos: “El grito lo dice todo. No estaba listo. Odio esto por él”, escribió una usuaria. En contraste, otra persona defendió la acción: “Él eligió ser lanzado y han construido esa confianza durante toda su vida”.

El salto desde el acantilado no es la única experiencia extrema que la familia ha compartido en redes sociales. Desde la creación de “The Bucket List Family” hace casi una década, han publicado actividades como surfear con tiburones o interactuar con un pulpo.

Garrett Gee y su esposa, Jessica, fundaron el proyecto familiar en agosto de 2015, después de vender todo lo que tenían y emprender un viaje por el mundo con sus tres hijos: Dorothy Seven, Manilla y Calihan. En ese momento, Garrett había vendido su aplicación de escaneo móvil a Snapchat por 54 millones de dólares, lo que les permitió iniciar su aventura.

En tan solo tres años, visitaron 65 países. En julio de 2018, se establecieron en Hawái, desde donde continúan documentando sus viajes y colaborando con National Geographic como fotógrafos y escritores.