Estados Unidos

«Pekelucas», el banco de pelo para los niños con cáncer

Con el objetivo de contribuir a generar una sonrisa y reforzar la autoestima de los niños con cáncer se ha constituido la asociación Pekelucas, y lo hará haciendo y facilitando pelucas a menores que han perdido parcial o totalmente el pelo a causa de un tratamiento de quimioterapia o radioterapia, quemaduras, o cualquier tipo de alopecia. Esta asociación, apoyada por la empresa fabricante de posticería y pelucas Free Style, da apoyo a los niños y facilita información a las familias que necesitan orientación de algún tipo.

“Conocíamos la existencia de asociaciones similares en América Latina y Estados Unidos y decidimos contactar con ellos. Así comenzamos el proyecto desde cero y empezamos a gestionar un banco de donantes de pelo y fabricar pelucas infantiles totalmente gratuitas y sin ningún gasto para las familias con el fin de proporcionar una peluca a la medida y adaptada a la actividad física a menores que las precisen por motivos de salud, si sus familias no puedan costearlas”, explicó a Servimedia la presidenta de Pekelucas, Berta Martínez.

“Hacer una peluca de cabello natural", agrega, "puede costar entre 300 y 500 euros, un desembolso que muchas familias no pueden afrontar si uno de sus hijos precisa una para paliar los efectos estéticos de un tratamiento oncológico u otro trastorno que provoca la pérdida del pelo”.

Desde el primer momento, Pekelucas hizo una campaña por las redes sociales, para conseguir que la ciudadanía realizara donaciones de pelo para elaborar estas pelucas. “Cortarse el pelo puede convertirse en un gesto solidario con una niña con cáncer u otras dolencias que provocan la pérdida del cabello”, manifestó la presidenta.

“Cada día llega al menos un paquete con cabello de fuera de Madrid y varios mensajes a través de las redes sociales ofreciéndonos pelo y difusión”, comentó Martínez.

El corte de pelo, que se realiza en su sede en Madrid, es gratuito y cada donante recibe un número de 'tracking' para poder acceder a la base de datos y saber cuál es el estado de su donación de cabello, e incluso recuperar el pelo si cambian de opinión, “la base de datos de los donantes está en Internet, por lo que los donantes pueden seguir el recorrido de su pelo y saber si se encuentra almacenado o si ya se ha convertido en peluca”, afirmó Martínez.

Según la presidenta de Pekelucas, “perder el pelo supone un problema de autoestima importante para los niños y niñas que se ven sometidos a este tipo de tratamientos. Pekelucas pretende devolverles la sonrisa y subirles la autoestima”.

El próximo objetivo es recaudar fondos con el lanzamiento de su calendario benéfico Pekelucas 2015. “Estas pelucas tendrían un valor, en el mercado, de más de 2.000 euros y Free Style se compromete a ofrecer dos pelucas mensuales. Por eso es necesario conseguir fondos para los gastos de confección, procesado del cabello y logística” manifestó Martínez.

Además, la asociación quiere darse más a conocer para así cubrir las necesidades de las familias que demanden sus servicios y lanzan el mensaje de que a pesar de la gravedad de la enfermedad, la realidad ofrece un motivo de esperanza y es que en España aproximadamente ocho de cada diez niños con cáncer se curan.