Pelea okupa en un bar: un detenido tras un altercado con cuchillo en mano

España está en pie de guerra contra los okupas, desde los vecinos hasta algunas instituciones. Los ciudadanos de distintas localidades se están organizando para vigilar e incluso desalojar algunos pisos okupados, como hicieron en Cancienes, en Asturias, donde tapiaron la entrada a un piso okupado. También muchos ayuntamientos y comunidades están empezando a promover e implementar normas que frenen los constantes casos.

Localidades como Ripoll han decidido implementar la medida de cortar el suministro eléctrico, que ha demostrado ser efectiva, no solo reduciendo okupaciones, sino también disminuyendo los índices de criminalidad. Mientras tanto, Madrid exige una ley antiokupas con desalojos en 24 horas y la prohibición del empadronamiento. Estas peticiones vienen provocadas por el daño a los propietarios y a todo el entorno de la localidad, como muestra un nuevo caso que tuvo lugar en las calles de Los Llanos de Aridane, perteneciente a la provincia de Santa Cruz de Tenerife.

Los okupas siembran el caos en Canarias

La tranquilidad en la localidad canaria se vio alterada por una pelea en un bar de la avenida Enrique Mederos detallada por 'El Time.es' y que acabó con un detenido y sin lesiones reseñables. Esto pudo ser totalmente diferente porque como muestran imágenes emitidas por dicho medio uno de los individuos, que aparece en mitad de la calle sin camiseta, porta un cuchillo en su mano derecha e intenta atacar con él a otro de los implicados.

Todo comenzó en el bar, pero acabó por las calles de la localidad. A plena luz del día y sin reparo ninguno se atacaban ante la mirada de los vecinos hasta la llegada de la Guardia Civil, que, según el mencionado medio, también recibió faltas de respeto durante su actuación. Los vecinos alucinaban ante lo que estaba ocurriendo en sus calles. "¡Chacho..!". Una tercera persona acabó frenando al portador del cuchillo y permitiendo que otro de los involucrados se resguardara.

Unos okupas muy conocidos

Los participantes en la pelea no eran unos jóvenes desconocidos sino un grupo de okupas desde hace tiempo están viviendo de forma ilegal en la Casa de Los Maestros, inmueble situado cerca del mercado municipal. Son conocidos por haber provocado otros altercados previos que interrumpen la tranquilidad de los vecinos de la zona. "Vamos a exigir contundencia porque no puede ser que se esté generando esta inseguridad ciudadana", afirmaba el alcalde de Los Llanos de Aridane, Javier Llamas.

El alcalde está cansado de la situación en su localidad y anuncia acciones contra los okupas en el medio local: "Se pedirá una cita con los juzgados de Primera y Segunda Instancia de Los Llanos de Aridane, así como, con los Juzgados de lo penal para mostrar la preocupación que tienen ante esta problemática". De igual manera, agradeció el trabajo de la Guardia Civil y lamentó la inseguridad: "Se la juegan constantemente con estas personas y ven como su trabajo se queda en nada cuando llegan a los juzgados y son puestos nuevamente en libertad", explica frustrado.

No es el único acto delictivo en la localidad

No están siendo días tranquilos en el municipio porque el pasado 29 de julio agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Compañía de Santa Cruz de La Palma, detuvieron a un hombre como presunto autor de un delito de tráfico de drogas en el casco urbano de Los Llanos de Aridane. La detención se produjo después de que los agentes observaran, en la estación de guaguas de dicho municipio, que el hombre tenía una actitud inusualmente sospechosa y esquiva ante su presencia, según informó la Guardia Civil en nota de prensa compartida por Europa Press.

Los agentes decidieron entrevistarse con el hombre para su identificación y, ante la actitud de nervios que mostró, realizaron un registro superficial de sus pertenencias, localizando de forma oculta en el interior de la mochila que portaba 630 euros en billetes de distinto valor. Además portaba una balanza de precisión, varias bolsas plásticas que contenían una sustancia blanca pulverulenta, presumiblemente cocaína, con un peso aproximado de 8,9 gramos, así como un carrete de hilo coincidente con el utilizado para atar dichas bolsas.