Qué alimentos están mejor fuera de la nevera

La invención del frigorífico supuso toda una revolución… un antes y un después en la técnica de conservación de los alimentos; que había sido una de las preocupaciones más constantes en la historia de la humanidad. Que el frío ralentiza la multiplicación de las bacterias y las reacciones químicas que acaban por estropear los alimentos sí que se conocía desde tiempos inmemoriales. Pero una máquina que fuese capaz de mantener los alimentos contenidos en una cámara a bajas temperaturas… eso sí que era una novedad.

Ahora bien, que el frío de la nevera sea realmente efectivo a la hora de alargar la vida de los alimentos, no implica necesariamente que sea aquí donde debamos guardar todos los alimentos de nuestro hogar. Hay algunas excepciones que deberíamos tener en cuenta:

No guardes estos alimentos en la nevera:

Conviene aclarar que ningún alimento se va a estropear porque lo metamos en la nevera. Lo que sí que puede suceder es que algunos vegetales, como los tomates o los aguacates, puedan ver como su proceso de maduración natural se detiene artificialmente cuando están expuestas a muy bajas temperaturas. No se van a estropear, pero tampoco van a alcanzar todo su potencial… en lo que a sus propiedades organolépticas se refiere. Estas verduras son las que conocemos como vegetales climatéricos. Son aquellas que solemos comprar aún sin madurar, porque sabemos que alcanzarán su estado óptimo de maduración en poco tiempo.

Ya hemos mencionado a los tomates y a los aguacates, pero esto también ocurre -por ejemplo- con los plátanos, los melones, las sandías y las piñas. Es cierto que en el caso del melón, la piña o de la sandía… son mucho más apetecibles cuando están fresquitos. Pero es mejor mantenerlos fuera del frigorífico y sólo meterlos unas horas antes de consumirlos. Eso sí, una vez abiertas siempre es mejor conservar estas frutas en el interior del frigo.

Otro producto que también está mejor fuera que dentro son los huevos. Cuando están expuestos en los estantes del supermercado no están refrigerados. Sin embargo, cuando los llevamos a nuestra casa, lo primero que hacemos es meterlo en la nevera… y ni siquiera nos preguntamos si esto es realmente lo que más les conviene.

Lo mejor para los huevos es una temperatura fresca (que no frío) y estable. Por lo que sí que puede ser aconsejable guardarlos en el frigorífico durante los meses de verano. Eso sí, si decidimos meter los huevos en la nevera, es importante que los coloquemos en el estante de arriba. Mucha gente los guarda en la puerta. De hecho, los fabricantes suelen incluir un módulo específico para colocar los huevos en la puerta de la nevera. Sin embargo, esta zona del electrodoméstico es muy poco estable y los cambios constantes de temperatura pueden hacer que los huevos se estropeen.

Por último, vamos a mencionar a las patatas, las cebollas y los ajos. El frío y la humedad no son buenos amigos de estos vegetales. Lo ideal es buscar un lugar seco y oscuro para ellos, aunque -eso sí- no deberíamos guardarlos en el mismo sitio, porque ambas plantas producen etileno, que es una hormona vegetal que afecta al crecimiento de las plantas… haciendo que estas maduren a una mayor velocidad.