Alimentación

¿Por qué no existe el yogur de naranja? Este es el desconocido motivo

Es una situación que no es exclusiva de España, sino que se repite en otros países donde el sabor tampoco ha logrado consolidarse

¿Por qué no existe el yogur de naranja? Este es el desconocido motivo sábado a las 15
¿Por qué no existe el yogur de naranja? Este es el desconocido motivo sábado a las 15La Razón

En las estanterías de los supermercados, los yogures de sabores forman parte del paisaje habitual desde hace décadas. Sabores como fresa, plátano o limón han logrado consolidarse como clásicos indiscutibles dentro del mercado lácteo. Sin embargo, una fruta tan común y popular como la naranja ha permanecido curiosamente al margen. A pesar de su fuerte presencia en zumos, refrescos o postres, el yogur de naranja es prácticamente inexistente en su versión más tradicional: la del yogur aromatizado.

Aunque algunos productos incluyen mermeladas o trozos de naranja, el clásico yogur con sabor artificial de naranja ha desaparecido casi por completo de los estantes. Este fenómeno no es exclusivo de España, sino que se repite en otros países donde el sabor tampoco ha logrado consolidarse.

Durante los años 70 y 80, marcas como Danone, Yoplait o Chambourcy llegaron a comercializar yogures sabor naranja o mandarina en el mercado español. La tendencia no se mantuvo. Con el tiempo, desaparecieron de forma silenciosa y sin demasiada explicación pública. Actualmente, son muy escasas las referencias a este sabor en la oferta de grandes fabricantes, incluso a nivel internacional.

Posibles razones

La ausencia del yogur de naranja responde, según diferentes teorías, a una combinación de factores. En primer lugar, la composición química de la naranja podría tener parte de culpa. Su acidez natural, al mezclarse con el ácido láctico del yogur, genera un peor sabor que el de otras frutas más suaves.

A esto se suma la dificultad técnica de desarrollar un aroma artificial de naranja convincente. A diferencia del limón o la fresa, cuyo perfil es más sencillo de sintetizar, la naranja contiene una combinación más compleja, dificultando su reproducción en laboratorio con buenos resultados.

Otro factor importante es el gusto del consumidor. A pesar del éxito de la naranja en otras categorías alimentarias, no ha mostrado la misma acogida en productos lácteos. Tampoco se ha observado una demanda significativa de batidos de naranja, lo que refuerza la idea de que el paladar colectivo no asocia favorablemente este sabor con texturas lácteas.

Nuevas tendencias del mercado

En la actualidad, el desarrollo de nuevos sabores en yogures se enfoca principalmente en líneas saludables: productos con alto contenido proteico, sin azúcares añadidos, enriquecidos con vitaminas o probióticos. En este contexto, relanzar un yogur clásico sabor naranja no parece ser una prioridad estratégica para las grandes marcas.