Tabaquismo
La recién creada Asociación Española de Bolsas de Nicotina reclama una regulación clara y menor fiscalidad para esta alternativa libre de humo
"España necesita una regulación e información coherentes, basadas en datos y no en ideología, que garanticen el acceso a estos productos únicamente a adultos y permitan al sector operar con seguridad jurídica", reclama la presidenta de la ABN, Mónica Andrade
La recién creada Asociación Española de Bolsas de Nicotina (ABN) reclama un marco regulatorio claro y basado en evidencia científica así como una menor fiscalidad para esta alternativa libre de humo que puede ayudar a reducir la tasa de tabaquismo. No obstante, su carga impositiva actual (0,10 euros por gramo) y la intención del Gobierno de prohibirla veladamente hacen peligrar sus potenciales beneficios para la salud pública.
Sin combustión ni inhalación, estos productos sin tabaco se utilizan de forma oral y liberan nicotina de manera progresiva durante un breve periodo de tiempo, reduciendo la exposición a sustancias tóxicas en más de un 95%. "Nuestro mensaje es claro: regular en lugar de prohibir. España necesita una regulación e información coherentes, basadas en datos y no en ideología, que garanticen el acceso a estos productos únicamente a adultos y permitan al sector operar con seguridad jurídica", reclama la presidenta de la ABN, Mónica Andrade.
"Actualmente, España carece de un marco regulatorio específico y existe mucha desinformación, lo que genera incertidumbre operativa para las empresas que fabrican y comercializan estos productos y potencia el riesgo de un mercado no controlado", denuncia la Asociación.
Asimismo, ABN pide que se revise la propuesta de modificación del Real Decreto 579/2017 impulsada por el Ministerio de Sanidad y que plantea limitar el contenido de nicotina a 0,99 mg por bolsa, lo que, en palabras del propio Ministerio de Sanidad, supondría una prohibición de facto de este tipo de productos en España, mientras que en la gran mayoría de los países los límites se sitúan muy por encima de esa cifra. Según el Instituto Federal de la Evaluación de Riesgos (Alemania), exponen que la dosis necesaria para que las bolsitas de nicotina ayuden a abonar el hábito del tabaquismo debe ser de 16 miligramos.
En materia impositiva, ABN propone una fiscalidad proporcional al riesgo, es decir, que se grave a las bolsitas de nicotina con un diferencial menor al de las opciones de combustión, más dañinas, así como la búsqueda de cierta armonización para competir con el resto de países de la UE, ya que mientras en España la carga impositiva es de 0,10 euros por gramos, en Italia es de 0,022 euros y de 0,065 en Portugal.
Durante su presentación, la asociación dio a conocer su primer documento de estándares voluntarios para la industria, que incluye compromisos en materia de protección de menores, calidad y seguridad del producto, empaquetado responsable, prácticas medioambientales y comunicación comercial dirigida exclusivamente a adultos.
En concreto, la Asociación Española de Bolsas de Nicotina propone incrementar la cantidad de nicotina de las bolsas hasta un rango de entre 16 miligramos y un máximo de 20 miligramos; restringir los sabores que puedan resultar especialmente atractivos para menores; garantizar que su venta se realice exclusivamente en estancos o en comercios autorizados donde la adquisición por parte de menores esté prohibida; e incorporar un etiquetado y un empaquetado con advertencias sanitarias y evitar imágenes que sean atractivas para menores.
La Asociación Española de Bolsas de Nicotina (ABN), miembro de la red internacional GINN (Global Institute for Novel Nicotine), aglutina a más de 40 empresas fabricantes y distribuidores europeos, entre ellas CLEW, Greatest, Denssi, Europouches, CAMO, Rush, Rebel, Mynt, Chemnovatic y Pouch Solutions.