Estados Unidos

Aumentar el consumo de café diario reduce el riesgo de diabetes tipo 2

Las personas que aumentaron la cantidad de café que bebían todos los días en más de una taza durante un periodo de cuatro años tenían un riesgo un 11 por ciento menor de padecer diabetes tipo 2 que aquellas que no realizaron cambios en su tipo de consumo de café, según revela un nuevo estudio dirigido por investigadores de la Escuela de Salud Pública de Harvard (HSPH, por sus siglas en inglés), en Boston, Massachusetts, Estados Unidos.

Además, los autores vieron que quienes disminuyeron su consumo de café en más de una taza al día aumentaron su riesgo de diabetes tipo

2 en un 17 por ciento. "Nuestros resultados confirman los de estudios previos que mostraron que un mayor consumo de café está asociado con un riesgo inferior de desarrollar diabetes tipo 2", destaca Shilpa Bhupathiraju, autor principal e investigador en el Departamento de Nutrición de la HSPH.

Lo más importante, prosiguem es que proporcionan nuevas pruebas de que los cambios en el hábito del consumo de café pueden afectar al riesgo de diabetes tipo 2 en un periodo relativamente corto de tiempo. Las conclusiones han sido publicadas en la revista 'Diabetologia'.

Los científicos analizaron datos sobre el consumo de café con cafeína y descafeinado y té con cafeína de 48.464 mujeres en el 'Brigham and Health Study' (1986-2006), 47.510 mujeres en el 'Nurses' Health Study II' (1991-2007) y 27.759 hombres en el 'Health Professionals Follow-up Study' (1986-2006). Evaluaron las dietas de los participantes cada cuatro años con un cuestionario y los que dijerontener diabetes tipo 2 rellenaron otros cuestionarios adicionales. Se documentaron un total de 7.269 casos de diabetes tipo 2.

Los resultados mostraron que los participantes que aumentaron su consumo de café en más de una taza por día (un aumento medio de 1,69 tazas/día) durante un periodo de cuatro años presentaban un riesgo un 11 por ciento menor de diabetes tipo 2 en los siguientes cuatro años en comparación con los que no cambiaron sus hábitos de consumo.

Una taza de café se definió hasta ocho onzas (22,73 cl) de café negro o con una pequeña cantidad de leche y/o azúcar. Los que redujeron su consumo de café diario más de una taza (una reducción de

2 tazas/día) presentaban un 17 por ciento más de riesgo de padecer diabetes. Los cambios en el consumo de café descafeinado y té con cafeína no se relacionaron con variaciones en el riesgo para la diabetes tipo 2.

"Estos resultados demuestran además que, para la mayoría de la gente, el café puede tener beneficios para la salud", subraya el autor principal, Frank Hu, profesor de Nutrición y Epidemiología en HSPH. "Pero el café es sólo uno de los muchos factores que influyen en el riesgo de diabetes. Es más importante que las personas vigilen su peso y sean físicamente activas", concluye.