Relación de pareja

Samantha, asesora de crianza: "No quiero que mi pareja haga lo que le digo. Quiero que esté pendiente"

El vídeo que se ha hecho viral expone la diferencia entre ejecutar tareas y compartir la carga mental en la crianza

Samantha, asesora de crianza: "No quiero que mi pareja haga lo que le digo. Quiero que esté pendiente"
Samantha, asesora de crianza: "No quiero que mi pareja haga lo que le digo. Quiero que esté pendiente"La Razón

Un mensaje directo, cotidiano y reconocible ha convertido a Samantha, asesora de crianza, en protagonista de un debate viral en TikTok. En su último vídeo, que ya suma más de un millón de visualizaciones, explica con claridad un sentimiento compartido por muchas mujeres, no se trata solo de que la pareja ayude, sino de que asuma la responsabilidad de estar pendiente de lo que hace falta en casa.

“No he comprado un ejecutor de tareas”

En su vídeo, Samantha relata una conversación con su pareja: “Mi pareja me dice: yo he traído el agua, he doblado la ropa que me has dicho. Si me pides que vaya a comprar, voy a comprar. Yo no es que no valore estas cositas. Lo que a mí me falta es que estés pendiente de si falta agua o no”.

La asesora de crianza subraya que lo difícil no es pedir una y otra vez lo que hay que hacer, sino cargar con la planificación constante. “Yo no quiero que me ayude, no quiero que haga lo que yo le estoy diciendo. Lo que quiero es que esté ahí pendiente de lo que falta, que abra los armarios de la cocina. No cuesta tanto. No sólo que ejecute tareas. No he comprado un ejecutor de tareas”.

El trasfondo: la carga mental en la crianza

El vídeo ha generado debate porque ilustra de forma sencilla lo que en psicología y sociología se denomina carga mental, la responsabilidad invisible de anticiparse a las necesidades del hogar y de los hijos.

La palabra que usamos para dirigirnos a nuestros hijos es completamente antieducativa
La palabra que usamos para dirigirnos a nuestros hijos es completamente antieducativaLa Razón

Aunque muchas parejas compartan las tareas domésticas de forma práctica, la diferencia aparece en quién piensa y organiza lo que hay que hacer. El relato de Samantha conecta con esa sensación de agotamiento que muchas madres expresan al tener que recordar constantemente lo que falta, cuándo hay que comprarlo o qué toca organizar.

Una conversación necesaria en la crianza y la pareja

El impacto viral del vídeo no se debe únicamente a su tono espontáneo, sino a que refleja una realidad extendida, la necesidad de que la corresponsabilidad vaya más allá de “hacer favores” o cumplir órdenes.

El mensaje de Samantha invita a abrir conversaciones en la pareja sobre la equidad en la crianza y las tareas domésticas, y sobre cómo compartir no solo el trabajo físico, sino también la atención y la planificación diaria.