Investigación

Sanidad financia una inmunoterapia para el cáncer en una inyección que se administra en siete minutos

El Ministerio de Sanidad dio luz verde a la financiación de ‘atezolizumab’ subcutáneo (SC), la primera inmunoterapia para el cáncer que se administra a través de una inyección subcutánea

Rueda de prensa de presentación de 'Tecentriq' de Roche ROCHE 09/07/2024
Rueda de prensa de presentación de 'Tecentriq' de RocheROCHEEuropa Press

El Ministerio de Sanidad dio luz verde a la financiación de ‘atezolizumab’ subcutáneo (SC), la primera inmunoterapia para el cáncer que se administra a través de una inyección subcutánea en aproximadamente siete minutos y que fue presentado este martes en Madrid.

En rueda de prensa, los expertos informaron que el año pasado, más de 38.000 personas recibieron esta terapia en Europa para tratar distintos tipos de tumores de pulmón, hígado, vejiga y mama. Hasta ahora, su administración era realizada mediante vía intravenosa (IV), una administración que tiene una duración aproximada entre 30 y 60 minutos.

La nueva inyección subcutánea reducirá el tiempo de tratamiento a cerca de siete minutos, con una duración que oscila entre los cuatro y los ocho minutos. La autorización de comercialización se aplicará a todas las indicaciones aprobadas para ‘atezolizumab’ en España.

En su intervención, la directora médico de Roche Farma España, la doctora Mariluz Amador, aseguró que “con esta nueva aplicación del tratamiento reforzamos nuestro compromiso de contribuir a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud, mejorando la experiencia de pacientes, cuidadores y profesionales sanitarios, optimizando los tiempos totales de tratamiento e impactando en el uso eficiente de recursos del sistema”.

La aprobación de este nuevo producto se basó en los datos del estudio fase IB/III IMscin001, que mostraron niveles comparables de ‘atezolizumab’ en sangre, cuando se administró por vía subcutánea, y un perfil de seguridad y eficacia consistente con la formulación IV.

Tal y como explicó la jefa de servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza y presidenta de la Asociación para la Investigación del Cáncer de Pulmón en Mujeres (Icapem), la doctora Dolores Isla, “para las personas que viven con cáncer es fundamental garantizar la mejor calidad de vida posible”.

Por ello, añadió, “contar con esta opción subcutánea, que pueda reducir el tiempo de tratamiento, sin duda marcará una diferencia significativa para los pacientes y su entorno familiar. Si hablamos del tiempo de los profesionales que atendemos a estos pacientes, también hay un impacto positivo, ya que se acelera todo el proceso”.

“Esto es muy importante para el sistema sanitario, teniendo en cuenta la elevada demanda que hay en los hospitales de día oncológicos. Además, si el paciente está más satisfecho con su tratamiento también mejora su adherencia al mismo. Por lo que todo son ventajas”.

La administración SC es la preferida por el 79% de los pacientes, tal y como se puso de manifiesto en el estudio IMscin00216. Los pacientes optaron por esta vía, ya que se trata de un procedimiento menos invasivo con una eficacia similar pero con menos dolor y molestias, lo que repercute en una mayor calidad de vida, haciendo posible una vida menos condicionada por la enfermedad, y una mejor adherencia terapéutica.

Asimismo, el 90% de los profesionales sanitarios que fueron encuestados como parte del estudio coincidieron en que la formulación SC es fácil de administrar y el 75% dijo que podría ahorrar tiempo a los equipos sanitarios en comparación con la formulación IV. Concretamente, se demostró que la formulación SC de ‘atezolizumab’ reduce, aproximadamente en un 80%, el tiempo de administración en comparación con la infusión IV estándar.

En este contexto, la enfermera de ensayos clínicos del Vall d’Hebron Instituto de Oncología – VHIO, Alba Silveiro, puntualizó que “esta forma de administración ayuda a mitigar sus miedos, optimiza los tiempos totales de tratamiento y de uso del hospital de día, lo que repercute en un uso más eficiente de los recursos”.

“Se trata de un tratamiento menos invasivo, alivia el dolor, los hematomas e irritaciones asociadas a la vía IV y está asociado a menores riesgos derivados del uso de dispositivos de acceso venoso. Todo esto tiene un impacto directo en la calidad de vida de estas personas”, añadió.