Londres

Inventan hologramas en 3D para facilitar el estudio de la anatomía

El sistema de hologramas en 3D usa un efecto ilusionario para ayudar a los estudiantes de medicina en asignaturas como anatomía

Doctores del Hospital de St. George de Londres han inventado un sistema de hologramas en 3D que usa un efecto ilusionario para ayudar

a los estudiantes de medicina en asignaturas como anatomía. El objetivo del descubrimiento es que se utilice como una herramienta complementaria y no como sustituto de los tradicionales cadáveres.

En una conferencia que tuvo lugar la semana pasada en la Universidad de St. George de Londres, los doctores precursores del hallazgo -Kapil Sugand y Pedro Campos- hicieron una demostración de su holograma. Gracias a él pudieron representar la función renal del cuerpo humano por medio de un gráfico en 3D de un riñón que contaba con unas dimensiones de 4 metros.

Dichos doctores están desarrollando varios tipos de animaciones de hologramas. Sin embargo, en el mismo evento, estos aseguraron que la invención no estaba preparada para llevarse a cabo todavía. "El coste por holograma estaría prohibido", subrayó uno de los ponentes de la universidad.

Según explicaron los expertos, se trata de animaciones y no de hologramas verdaderos, pero tienen una base fundamental en una ilusión llamada "el fantasma de Pepper", el cual usa cristal o papel de aluminio combinando con unas técnicas especiales de luces que simulan que los objetos aparezcan en medio de la nada.

El objetivo de esta innovadora metodología no es otro que facilitar el trabajo de los estudiantes ayudándoles de esta manera a asimilar los montones de folios que deben aprenderse para aprobar sus exámenes.

"El cuerpo humano es una máquina muy compleja; y resulta bastante difícil comprender y apreciar cómo un riñón o un hígado funcionan a través de unas diapositivas de Powerpoint, por ejemplo", explicaron los expertos.

Finalmente, el doctor Sugand quiso aclarar que este tipo de animaciones debían entenderse como una herramienta extra, y no como un sustituto del uso de cadáveres para el estudio del cuerpo humano, ya que éste es hoy en día "el modo más óptimo a la par que tradicional de aprender anatomía".