Ciencia y Tecnología

La inteligencia artificial hará el 45% de los trabajos actuales

En dos décadas reemplazará a personas en transporte, logística y administración, pero generará nuevos y más empleos

UN PINCHE EN CASA. El robot PR2 prepara una tortita en el Instituto de Inteligencia Artificial de la Universidad de Bremen, en Alemania
UN PINCHE EN CASA. El robot PR2 prepara una tortita en el Instituto de Inteligencia Artificial de la Universidad de Bremen, en Alemanialarazon

Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Oxford afirma que en dos décadas, casi la mitad de los trabajos no será ejecutado por humanos.

Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Oxford afirma que en dos décadas, casi la mitad de los trabajos no será ejecutado por humanos. Para llegar a esta conclusión, el equipo de Carl Benedikt Frey examinó cuan susceptibles son ciertos oficios de ser realizados por ordenadores, robots o inteligencia artificial. Evaluando 702 empleos, se los enfrentó a los avances tecnológicos y el impacto que estos tendrán en el mercado laboral y la educación. Los resultados obtenidos señalan que en 20 años, cerca del 45 por ciento de los trabajos será propiedad de la inteligencia artificial (IA). El estudio también demuestra que cuanto mayor es la educación y el salario, menor la posibilidad de que esto ocurra.

De acuerdo con los investigadores, esto se producirá en dos fases. En la primera los ordenadores comenzarán a reemplazar a las personas en áreas particularmente vulnerables: transporte, logística y administración. En esta primera instancia también pueden perderse oficios relacionados con la construcción, las ventas y los servicios. Luego se producirá una ralentización, una suerte de cuello de botella debido a tareas difícil de sustituir, como ingeniería. La segunda etapa comenzará con una segunda ola impulsada por grandes avances en IA y computación cuántica. En este momento se comprometerán las profesiones relacionadas con la ciencia, el arte, la ingeniería y el marketing.

Todo esto no hace más que confirmar lo que opinan muchos expertos: la tecnología genera desempleo. Pero la realidad es muy diferente y el ejemplo más claro es la tecnología informática: los ordenadores han posibilitado que los humanos lleven a cabo tareas mucho más complejas de las que podían realizar 10 años antes. Gracias a ello surgieron nuevos empleos: desarrollador de aplicaciones para móviles, programador web, expertos en simulaciones, diseñadores... Una economía en la cual los trabajadores especializados resultan más eficientes o abren nuevos campos merced a los robots, no es una idea novedosa. En un artículo del año 2007, de la revista «Scientific American», el fundador de Microsoft, Bill Gates, manifestaba que nos encontrábamos en la orilla de una revolución robótica que sería semejante a la que produjeron los ordenadores en su día. El gran cambio comenzó cuando los ordenadores dejaron de ser propiedad de las universidades y se convirtieron en una tecnología personal que incrementó dramáticamente la productividad de los trabajadores. Algo similar ocurrirá con los robots, aseguraba Gates: «Al observar las tendencias que están comenzando a surgir, veo un futuro en el que los robots serán una presencia constante en nuestra vidas».Una presencia que no pondrá en juego nuestros trabajos, como demuestran las cifras.

En 1940 se alcanzó el pico de personas empleadas en la industria de la manufactura: el 40 por ciento de la fuerza laboral estaba allí. Desde entonces, la cifra ha disminuido hasta llegar al 9 por ciento. Pero algo extraño está ocurriendo: desde hace dos años los porcentajes han vuelto a crecer y medio millón de personas han regresado a la producción manual. Esta tendencia, bautizada como «reshoring» (vuelta a la orilla) por los expertos, combinada con los costes cada vez más altos de energía y la facilidad y eficiencia de sistemas energéticos alternativos, ha permitido que muchos países vuelvan a fabricar aquello que antes importaban, produciendo un beneficio en la economía local.

Más datos que contradicen la opinión generalizada de la tecnología como gillotina del empleo. Un estudio denominado Impacto Positivo de la Industria Robótica en el Empleo asegura que en los próximos ocho años se crearán entre dos y 3,5 millones de puestos nuevos por esta industria. Según la investigación cada robot crea entre 3 y 5 nuevos puestos, mientras que el empleo indirecto genera entre 8 y 10 millones de puestos.

El debate acerca de las máquinas reemplazando a los humanos comenzó con los primeros autómatas y sólo ha contribuido a crear un miedo irracional hacia la tecnología y un desinterés generalizado: conocer los avances no es sinónimo de usarlos. El conocimiento aporta una profundidad que permite intentar anticipar los futuros cambios y las necesidades que vendrán.

El FUTURO DE LA AGRICULTURA

Científicos de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) han creado un robot esférico motorizado dotado de GPS y giroscopios capaz de moverse de manera autónoma por los terrenos más complejos. Bautizado Rosphese, su primera misión ha sido medir la humedad de campos destinados al cultivo. Su próxima parada podría ser Marte.