Tráfico

Un control a media mañana: 6 positivos a drogas y alcohol en menos de 1 hora

Aún no eran las 12.30 horas y cinco conductores habían dado positivo a drogas y uno a alcohol en un control montado menos de una hora antes

Aún no eran las 12.30 horas y cinco conductores habían dado positivo a drogas y uno a alcohol en un control montado menos de una hora antes. Así ha comenzado la campaña que Tráfico ha puesto en marcha desde hoy y hasta el domingo para que nadie se ponga al volante después de haber consumido estas sustancias.

Sobre todo en estas fechas, cuando la mayoría de los españoles asiste a una comida o cena de Navidad con familiares y amigos, en la que el alcohol o las drogas suelen estar presentes. Por eso, en esta semana se van a realizar más de 25.000 controles diarios. En cualquier carretera y a cualquier hora.

La directora general de Tráfico, María Seguí, ha querido asistir hoy al pistoletazo de salida en Madrid de esta campaña de vigilancia y control, en la que los agentes de la Guardia Civil han detectado en tan solo una hora a cinco conductores que habían consumido cannabis y tres de ellos también cocaína, y a uno con síntomas de haber ingerido alcohol.

Sus casos se sumarán a los 190.000 conductores que entre 2013 y lo que va de este año han sido sancionados por ponerse al volante tras haber consumido esas sustancias. Además, 10.000 de ellos, tal y como ha subrayado Seguí a los periodistas, eran reincidentes y hasta en tres ocasiones habían sido "pillados"en esas mismas circunstancias.

Y más datos que la DGT quiere poner sobre la mesa para advertir de las consecuencias de ese consumo: 20.000 conductores han perdido su carné por alguna sanción por alcohol o drogas. Mil de ellos lo han perdido dos veces.

A alrededor de 50.000 conductores se les ha suspendido temporalmente el carné por vía judicial y a otros 350 se les ha retirado para siempre.

Un binomio, el de alcohol/drogas y conducción, que preocupa especialmente a la Unión Europea, toda vez que en torno al 25 por ciento de las muertes en carretera en su territorio están relacionados con ese factor de riesgo.

Otro dato en que la máxima responsable de la DGT ha querido incidir refleja que doce de cada cien conductores controlados para un estudio de 2013 presentaban consumos recientes de drogas y/o alcohol.

Con el deseo de erradicar esos consumos al volante, María Seguí ha recordado que una mujer que pesa 60 kilos daría positivo con solo una copa de vino y un hombre de 80 kilos lo daría también con dos copas de esa misma bebida.

"Los peligros son reales, existen. Y por eso no se puede dar tregua a la mala conducción y a la combinación letal de vehículos obsoletos con conductores incapacitados por el alcohol y las drogas y circulando a velocidad excesiva", ha recalcado Seguí.

Por ello, ya el pasado viernes la DGT puso en marcha otra campaña en las carreteras secundarias para controlar el exceso de velocidad combinado con la ingesta de sustancias psicotrópicas.

En tan solo tres días escasos de campaña el resultado es revelador, según Seguí: 5.800 conductores han sido sancionados en esas vías por sobrepasar los límites de velocidad y además haberse subido al vehículo tras haber consumido alcohol o drogas.

María Seguí ha dejado claro que, porcentualmente, las drogas están mucho más presentes que el alcohol al volante, como demuestra que en los 24.000 controles de drogas realizados en 2014, en un 50 por ciento de ellos el resultado fue positivo.

Tráfico quiere recordar que conducir después de haber ingerido alcohol multiplica hasta nueve veces el riesgo de provocar un accidente y que a mayor concentración de alcohol en sangre, el índice de siniestros también se incrementa, como también se agrava la lesividad.

Los efectos del consumo de drogas sobre la capacidad de reacción y concentración del conductor son también muy importantes.

La reforma de la Ley de Seguridad Vial incrementó las sanciones y puso a los reincidentes en el punto de mira. Así, para estos últimos, es decir, los que hubieran sido sancionados en el año inmediatamente anterior por dar positivo a alcohol, la sanción es de 1.000 euros, además de conllevar una pérdida de 6 puntos.

Igualmente son sancionados aquellos conductores que circulan con una tasa que supere el doble de la permitida.

Para los no reincidentes y una tasa de entre 0,25 y 0,50 miligramos de alcohol por litro de sangre la sanción es de 500 euros y la detracción de 4 puntos.

En el caso de las drogas, la ley prohíbe conducir con presencia de ellas en el organismo, excluidas las sustancias que se utilicen bajo prescripción facultativa y con una finalidad terapéutica. Esta infracción, catalogada como muy grave, está castigada con una sanción de 1.000 euros y la retirada de 6 puntos.