El fin del Pablo Escobar «español»

Uno de los agentes, que está fuera de peligro, recibió un disparo en la clavícula y ha sido intervenido de urgencia. Otro ha recibido un balazo en el corazón, pero el chaleco antibalas le ha salvado la vida. La operación, que dirige la juez Lamela, se desarrolla en Galicia, Madrid y Andalucía.

El conocido narcotraficante José Ramón Prado Bugallo, alias «Sito Miñanco», que fue detenido ayer en el marco de la «operación Mito», había puesto en marcha un plan para hacerse con el control de esta actividad delictiva en toda Galicia, según han informado a LA RAZÓN fuentes de la investigación.

Para ello, ya había iniciado un acercamiento con el clan de «El Pastelero o Costiñas», con la «contratación» de David Pérez Lago, hijastro de otro «renombrado» narcotraficante gallego, Laureano Oubiña. La aproximación a la otra organización, la de «El Burro», que nunca ha sido detenido, estaba siendo muy complicada. Miñanco cuenta a su favor con que nunca ha delatado a nadie.

Los investigadores de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) eran conocedores de estos movimientos e iniciaron la citada operación, que se ha prolongado durante varios meses, en la que se encontraron con la primera sorpresa. Miñanco, que disfrutaba del tercer grado penitenciario y podía salir de la cárcel, había asistido, al menos, a una descarga de droga en la Costa de la Morte, en Galicia. Junto a él estaba un antiguo colaborador de la zona de Ribeira. Lo cierto, es que desde 2001, en que empezó sus actividades delictivas, no ha modificado apenas su «equipo». A estos individuos se les han detectado viajes a Europa y Sudamérica.

Ha llamado la atención los medios técnicos de telefonía y encriptación de que disponían para eludir las escuchas policiales y que son de los más modernos del mercado.

Estaba claro que Miñanco no se había apartado nunca del mundo del narcotráfico pese a los 17 años que estuvo en la cárcel. Además, se investiga si el aparcamiento de Algeciras en el que «trabajaba» como tapadera es, en realidad, de su propiedad a través de una tercera persona, que, de algún modo, ha colaborado con él.

A lo largo de estos meses, los agentes han podido reunir evidencias que implican a los detenidos (a la hora de cerrar esta edición eran 30 pero se confiaba en llegar a los 40) no sólo en el narcotráfico sino en blanqueo de capitales.

Las citadas fuentes consideran que se ha logrado desmantelar la organización criminal que lideraba Miñanco. Entre los arrestados, se encuentran también su hija, arrestada en Cambados, donde regenta una inmobiliaria, así como sus principales «lugartenientes»: el hijastro de Oubiña; Ramiro Somoza y Enrique Arango.

Miñanco ha sido detenido en varias ocasiones desde que comenzó a traficar con tabaco y, posteriormente, con cocaína. La «operación Mito» se desarrolló ayer, cuando Su Majestad el Rey presidió el 50 aniversario de la Brigada Central de Estupefacientes, unidad integrada en la Udyco de la Policía.

Durante el dispositivo, dos agentes del Grupo Especial de Operaciones (GEO), que registraban una nave situada entre los municipios madrileños de Collado Mediano y Alpedrete, en la que se ubicaba una galería de tiro, resultaron heridos en un tiroteo con uno de los presuntos narcos. Ambos llevaban chalecos antibala. El comisario general de Policía Judicial, Eloy Quirós, explicó que uno de los agentes del GEO resultó herido en una clavícula por impacto de bala aunque evoluciona favorablemente sin que su vida corra peligro tras ser intervenido.

Sito Miñanco, de 62 años y nacido en Cambados, está en semilibertad desde abril de 2015, cuando obtuvo este régimen penitenciario en la cárcel de Algeciras.

El narcotraficante gallego está pendiente de un juicio por blanqueo y la Fiscalía pide para él 16 años de cárcel.