Si ves este agujero en tu patio, significa que hay una serpiente viviendo dentro

Con la llegada de las altas temperaturas, también llegan las ganas de salir al jardín, tumbarse al sol o preparar barbacoas. Sin embargo, lo que muchos olvidan es que esta estación también reactiva la vida animal. En especial, es la época en la que reptiles como las serpientes vuelven a hacer acto de presencia tras los meses de frío.

Estos animales, temidos por muchos, saben cómo pasar desapercibidos y aprovechan cualquier rincón tranquilo para convertirlo en su escondrijo. Los jardines, en este contexto, se transforman en auténticos paraísos para ellas. Para muchos, solo ver una serpiente es suficiente para entrar en pánico. Y, aunque no todas son venenosas, su presencia cerca del hogar no deja de inquietar.

¿Dónde se esconden las serpientes?

Durante la primavera y el verano es habitual observar pequeños agujeros en la tierra del jardín. Esto no debería alarmar de inmediato, ya que muchas especies, como topos, topillos o ratones de campo, excavan galerías subterráneas con distintos fines como construir nidos, buscar alimento o simplemente desplazarse.

También algunos insectos, como abejas o avispas solitarias, son expertos en excavar cavidades para depositar sus huevos. Este comportamiento, completamente natural, forma parte del ecosistema del jardín. Pero lo interesante es que estas estructuras pueden terminar siendo utilizadas por otros animales, como reptiles o incluso serpientes, para refugiarse.

El agujero donde viven las serpientes

A diferencia de los mamíferos excavadores, las serpientes no tienen garras ni patas, por lo que no pueden abrir sus propias madrigueras. Sin embargo, son expertas en adaptarse ya que reutilizan túneles creados por otros animales, escondiéndose bajo piedras, troncos, entre montones de leña o en grietas del terreno. Pero los agujeros que más les gustan son sin duda son como los de la fotografía.

Señales para reconocer un refugio de serpientes en tu jardín

Identificar si un agujero en el jardín está siendo usado por una serpiente requiere observación. Las entradas suelen ser algo mayores que una moneda, y a menudo se encuentran cerca de zonas húmedas, sombrías o poco transitadas. Además del tamaño, hay otros indicios que pueden alertarte.

• Restos de muda: fragmentos de piel seca cerca de la entrada.
• Rastros en la tierra: marcas onduladas características del deslizamiento de una serpiente.
• Excrementos peculiares: suelen ser oscuros y alargados, con un extremo blanquecino.