Sin vinagre ni lavadora: el truco sencillo de los expertos en limpieza para lavar tus zapatillas sin dañarlas

Las deportivas, también conocidas como playeras, bambas, tenis o zapatillas, son un tipo de calzado imprescindible en el armario de muchas personas por su comodidad, versatilidad y estilo. Sin embargo, al usarse con frecuencia, es común que acumulen suciedad, manchas y malos olores.

Aunque meterlas directamente en la lavadora puede parecer lo más rápido y fácil, este método no es el más recomendable, ya que puede deteriorar materiales delicados, deformar su estructura o hacer que pierdan color y agarre.

Por eso, expertos en limpieza recomiendan un método alternativo, un truco mucho más sencillo, económico y eficaz. Para todo tipo de materiales, este proceso deja tus zapatillas como nuevas, sin necesidad de que puedan salir destrozadas de la lavadora.

El método infalible para que tus zapatillas aparenten ser nuevas

Es fundamental una limpieza manual cuidadosa que respete los materiales del calzado. Este procedimiento puede aplicarse a zapatillas de tela, cuero sintético o malla, y es ideal para conservar su forma y aspecto por más tiempo.

1. Primer paso: desmonta las zapatillas

Antes de empezar, retira los cordones y las plantillas, estos componentes deben lavarse por separado. Los cordones pueden sumergirse en un recipiente con agua tibia y una pequeña cantidad de jabón neutro.

Las plantillas, si son extraíbles, pueden limpiarse con la misma mezcla, utilizando un cepillo de dientes viejo para eliminar la suciedad acumulada, especialmente si han absorbido sudor u olores.

2. Elaboración de la mezcla limpiadora

En un recipiente, mezcla agua tibia con un poco de detergente líquido para ropa delicada o un jabón neutro. Es importante que evites productos agresivos o muy espumosos.

La proporción recomendada es una cucharadita de jabón por cada litro de agua.

3. Cepillado suave y con truco

Con un cepillo de cerdas suaves, frota la superficie exterior de las zapatillas en movimientos circulares. Presta especial atención a las áreas más sucias, como la puntera, los laterales y la parte del talón.

Si no cuentas con un cepillo especial, un cepillo de dientes viejo te puede hacer el apaño. Para zonas difíciles, se puede hacer una pasta con bicarbonato de sodio y un poco de agua. Aplícala directamente sobre la mancha y frota suavemente.

5. El paso final para el acabado perfecto

No enjuagues las zapatillas directamente bajo el grifo, en su lugar, utiliza un paño húmedo para retirar los restos de jabón. Para el secado, introduce papel absorbente dentro del calzado para mantener su forma y absorber la humedad.

Déjalas secar al aire en un lugar ventilado, lejos de la luz solar directa o fuentes de calor como radiadores, que podrían deformar los materiales.

Consejos extra para mantener tus zapatillas impecables

• Limpieza regular: No esperes a que estén muy sucias, para una limpieza más superficial.

• Evita productos agresivos: Aunque algunos remedios caseros incluyen vinagre o lejía, estos pueden dañar tejidos y causar decoloración.

• Utiliza sprays desodorantes: Ayudan a mantener el interior fresco y libre de malos olores.

Con este truco casero, seguro y libre de vinagre, no solo mantendrás tus zapatillas limpias, sino que también prolongarás su vida útil, sin necesidad de recurrir a métodos que pueden poner en riesgo la forma y calidad de tus deportivas.