Condenan a tres años de prisión a una pareja por estafar más de 100.000 a un cura

La Audiencia Provincial de León ha sentenciado a tres años de prisión a un hombre y una mujer por cometer una estafa contra un párroco, ordenando también que indemnicen al afectado con la suma de 101.550 euros. Adicionalmente, el tribunal ha impuesto al hombre una condena de tres años de prisión por intento de robo con violencia, así como una pena de 18 meses por lesiones. La pareja, que compartía una relación sentimental con hijos en común, estableció contacto con el sacerdote en 2020. Según el fallo del tribunal provincial, utilizaron engaños y datos falsos para ganarse la confianza del religioso, persuadiéndolo de que atravesaban una crisis extrema con el propósito de obtener dinero por parte del párroco.

Incluso simularon una enfermedad grave de uno de sus hijos y una supuesta carencia total de recursos para alimentación y vivienda. De esta manera, lograron hacer creer al cura que podrían reembolsarle el dinero, asegurando que estaban a la espera del pago de un seguro y que necesitaban realizar grandes desembolsos de honorarios a un abogado para lograrlo, información que resultó ser falsa.

A lo largo de 2020 y gran parte de 2021, solicitaron al sacerdote sumas de dinero que este les entregó, confiando en que se destinaban a resolver los problemas familiares y serían devueltas en el futuro. El párroco realizó numerosas transferencias bancarias, pagos en efectivo e incluso utilizó fondos propios de la parroquia, llegando a pedir dinero prestado a amigos y feligreses. El hombre recibió personalmente 150 euros en efectivo y mil euros a través de un giro postal, mientras que la mujer obtuvo ingresos y transferencias periódicas por un total de 100.400 euros en sus cuentas.

En el año 2021, el alcalde y un guardia civil advirtieron al párroco sobre el fraude que estaba sufriendo, lo que llevó a que dejara de proporcionar dinero a la pareja. Posteriormente, el hombre, junto con dos individuos no identificados, se dirigieron al domicilio del párroco con la intención de obtener dinero u objetos de valor. En el lugar, agredieron a la víctima y registraron las habitaciones en busca de dinero, aunque no lograron apropiarse de nada y huyeron por temor a ser descubiertos.

Una tercera persona fue enjuiciada, pero la Sala no consideró probada su participación en los hechos y la absolvió de los cargos de robo con violencia en grado de tentativa y lesiones. La sentencia, notificada a las partes, no es definitiva y puede ser impugnada ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.