Rouco: «El Evangelio es el mejor proyecto de vida para un joven»
«San Mateo era un gran pecador, un hombre que se dedicaba a cobrar impuestos para los romanos, algo que estaba muy mal visto en la sociedad de sus tiempos, sobre todo por los suyo que le consideraban un judío traidor. Sin embargo, el Señor se fija en él y le llama. Mateo deja la mesa del cobro y se va con Él sin dudar, sin vacilar».