Energía

Elon Musk predijo una terrible crisis para 2025, pero ¿tenía razón?

La ingente cantidad de pronósticos que arroja Elon Musk en sus distintas manifestaciones públicas hace que su imagen como visionario se exponga a fallos de pronósticos

Elon Musk durante su videoconferencia para la BWC24
Elon Musk durante su videoconferencia para la BWC24YouTube BCW24

Cuando alguien piensa en el director ejecutivo y fundador de diferentes empresas con un gran volumen de negocio, es muy probable que también piense en alguien a quien le queda poco tiempo para otras cuestiones y que centra todo su tiempo y esfuerzo en solventar el día a día de sus proyectos.

Esto es algo que resulta razonable que se cumpla con la mayoría de empresarios, pero no con Elon Musk. El magnate canadiense de origen sudafricano tiene tiempo para ocuparse de las cuestiones de Tesla, de SpaceX, de Neuralink o de xAI, su empresa de desarrollo de inteligencia artificial con la que aspira a crear una enciclopedia en línea que sustituya a la Wikipedia. Y también de opinar, sobre todo.

Ya que, a mayores de eso, aún le queda tiempo de realizar decenas de publicaciones en redes sociales e incluso de participar en charlas en las que lanza vaticinios sobre diversas materias. Siempre con la misma firmeza, confianza y seguridad en que lo que apunta es algo que si no es verdad ahora, lo será en algún momento. ¿Pero qué ocurre cuando uno lanza pronósticos de manera indiscriminada? Que en alguno, por muy visionario que sea, puede fallar.

Una escasez que no ha sido tal en 2025

Elon Musk participó en marzo de 2024 en la conferencia Bosch Connected World que la empresa de ingeniería y servicios alemana organizó para hablar de negocios digitales e inteligencia artificial. La intervención de Musk, eso sí, se produjo por videollamada, ya que tiempo de hacer pronósticos sí, pero los viajes transoceánicos restarían horas a sus otros quehaceres.

Durante su intervención Musk lanzó un vaticinio que llamó la atención de los asistentes por lo acotado en el tiempo que estaba y por la cercanía que fijaba, además de por las consecuencias que apuntaba, por supuesto. En él, el empresario señalaba que la siguiente gran crisis que debería afrontar la humanidad se encontraba tan a las puertas como que se produciría en 2025: “Creo que es algo que sucederá el año que viene”, recalcó.

La causa de esa crisis a la que dirigía Elon Musk la mirada, la escasez de producción de electricidad como para seguir el ritmo de la generación de procesadores necesarios para el entrenamiento de los diferentes modelos de inteligencia artificial: "Nunca he visto una tecnología avanzar tan rápido como esto", destacó Musk.

Ese avance debería ir acompasado de un avance en las redes de generación y abastecimiento de electricidad, y fue en ese punto donde Elon Musk se mostró más pesimista, justificando así su apuesta de una gran crisis en 2025:

"Entonces, la próxima escasez será la electricidad. No podrán encontrar suficiente electricidad para hacer funcionar todos los chips. Creo que el año que viene, simplemente no podrán encontrar suficiente electricidad para hacer funcionar todos los chips”

Elon Musk durante la conferencia Bosch Connected World de 2024

Tanto el desarrollo de la inteligencia artificial como el que está asociado con las necesidades de los vehículos eléctricos eran el argumento esgrimido por el mayor accionista de Tesla para referir un punto de inflexión eléctrico en 2025. Por fortuna para el mundo, esa crisis, apagón temporal en España y parte de Europa al margen, no se ha producido. Habrá que ver si a Elon Musk le ha fallado tan solo el horizonte temporal o si su vaticinio continúa sin cumplirse de año en año.