Semiconductores

Intel desvela sus nuevos procesadores: utilizan un nuevo semiconductor asombroso

Intel presenta su nuevo procesador Panther Lake con la tecnología más avanzada, un movimiento que se produce tras la adquisición de un paquete accionarial por parte del Gobierno de Estados Unidos

El edificio Robert Noyce, en Santa Clara, California, es la sede central de Intel Corporation
El edificio Robert Noyce, en Santa Clara, California, es la sede central de Intel CorporationIntel Corporation

No están siendo tiempos sencillos para Intel. La empresa tecnológica estadounidense ha requerido apoyo económico de diferentes actores, como el conglomerado japonés Softbank, en un momento crucial en el que busca recuperar terreno perdido en la carrera de los semiconductores y tras haber optado por un cambio en la dirección ejecutiva el pasado mes de marzo, con la llegada al cargo de Lip-Bu Tan.

Dicha inversión supuso respaldo a sus posibilidades, que se vieron reforzadas por las expectativas de NVIDIA, que alcanzó un acuerdo para hacerse con paquete accionarial de Intel por valor de 5.000 millones de dólares, que conlleva además el desarrollo conjunto de varias generaciones de productos.

Intel aspira con todo ello, y junto a la inyección económica recibida por parte de la administración de Donald Trump, a retomar el pulso en una industria tan competitiva como la de los semiconductores. Para ello, el primer paso llega con el anuncio de un nuevo procesador de la familia Intel Core Ultra.

Una ofensiva en todos los frentes del mercado

El Gobierno estadounidense materializó el pasado mes de agosto la compra de una participación del 10% en el gigante de los semiconductores Intel, una operación atípica en la industria que evidencia el interés estratégico de Washington por asegurar el control de un sector crítico para su economía y seguridad nacional.

Este respaldo institucional ya tiene un primer fruto tangible: el procesador Panther Lake. Este chip es el primero que se fabrica íntegramente con la arquitectura 18A. Su producción ya está en marcha en la planta Fab 52 de Chandler, en Arizona, y se espera que la distribución a los fabricantes comience a finales de este mismo año, reforzando la capacidad productiva en suelo norteamericano.

En palabras de Lip-Bu Tan, CEO de Intel, se trata de un primer paso hacia el futuro que se dibuja en materia tecnológica: “Estamos entrando en una nueva y emocionante era de la informática, posible gracias a los grandes avances en la tecnología de semiconductores que definirán el futuro durante las próximas décadas”, señaló en un comunicado de prensa de la firma.

Por otro lado, la estrategia de la compañía no se limita al mercado de consumo. Intel también ha desvelado sus planes para el sector estratégico de los servidores con el anuncio del procesador Xeon 6+ (Clearwater Forest), un componente que, según informa el medio Tech Crunch, está destinado a centros de datos y supercomputación y que también se beneficiará de la avanzada tecnología 18A.

Con estos movimientos, tanto en el ámbito del consumo como en el de servidores, el objetivo final de la empresa no es otro que recuperar el liderazgo perdido en la industria mundial de semiconductores y reducir la dependencia de las cadenas de suministro globales.