Bill Gates es, posiblemente, una de las figuras más controvertidas de la historia de la tecnología reciente. Bien es cierto que desde hace unos años su figura ha sido encumbrada por haber predicho cuestiones clave como la irrupción de la COVID-19. Pero la realidad es que, más allá de eso, ha tenido puntos de fricción muy importantes desde siempre. El más rotundo está relacionado con su paso por IBM, junto con Steve Jobs, y la importancia que el posible robo de tecnología tuvo para la creación de Microsoft y de Apple. No obstante, la cuestión no se detiene exclusivamente ahí.

Ahora, una de sus principales misiones es pontificar sobre la IA y el potencial enorme que esta tiene. Pero hace unos años, Gates se reunía de manera asidua con uno de los grandes monstruos de la historia reciente de los Estados Unidos, y esto pudo costarle algo tan valioso como su matrimonio. El experto tecnológico tenía entre su camarilla de inversores ni más ni menos que a Jeffrey Epstein, un hombre opaco, oscuro y con uno de los casos de abusos y trata más escandalosos de los últimos años. Con Epstein se han reunido figuras como Biden o el propio Donald Trump, pero la cuestión es ¿cuán estrecha era esta? ¿estaban estas personas relacionadas con los casos de abusos? Es difícil saberlo, y es posible que muchos simplemente fueran a fiestas normales en su isla.

Sin embargo, Bill Gates trató de tener una relación muchísimo más estrecha con el criminal que se suicidaría en la cárcel en el año 2019.

Un regalo envenenado

Tim Schwab es, posiblemente, el biógrafo más mordaz de Silicon Valley. Su misión no es adular, ni crear un personaje idílico en el que solo se muestran sus afectos y cualidades y no sus defectos. Al contrario, en su libro El problema de Bill Gates, el experto lleva a cabo una meticulosa investigación para determinar cuáles son los puntos más oscuros en los que se vio inmerso el acaudalado milmillonario.

Uno de ellos fue, sin lugar a dudas, su extraña relación con Jeffrey Epstein. En su biografía se puede leer que "Estaba dispuesto a asociarse con un monstruo como Epstein para recaudar fondos destinados a la salud mundial, ¿qué no estará dispuesto a hacer para impulsar sus planes?". Solo para recibir dinero de su parte para la Fundación Bill y Melinda Gates (ahora solo Bill Gates) estaba dispuesto a aliarse con el diablo.

Esto ha hecho a Tim Schwab plantearse si realmente merecía la pena o si realmente esta era su única relación, ya que Bill Gates se ha rodeado de un equipo enorme de personas que velan por mantener su imagen pública completamente intachable. Esto ha hecho que determinar hasta dónde llegaba la relación de amistad entre ambos fuera muy difícil. Puede que realmente existieran más conexiones, pero las distintas versiones que han ofrecido los relaciones públicas de Gates han sido siempre de una total abnegación por la Fundación, que le causaron llevar a cabo conversaciones con cualquier persona dispuesta a aportar dinero, incluida una como Jeffrey Epstein.

Epstein apareció muerto, presumiblemente por suicidio, en una cárcel de Nueva York. El millonario estaba relacionado con casos de trata de blancas y abuso infantil en su isla, donde los famosos de Estados Unidos llevaban a cabo ostentosas fiestas.