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Se venden PCR negativas para trabajar a toda costa y viajar sin restricciones

Se ha notado un incremento en la demanda de este tipo de artimañas para burlar los requerimientos del sistema

Se venden PCR negativas para viajar sin restricciones
Se venden PCR negativas para viajar sin restriccionesFernando VillarAgencia EFE

A partir del próximo 23 de noviembre, España exigirá una PCR negativa a los pasajeros que quieran entrar en el país por vía aérea o marítima, ya sean procedente de los 28 territorios de la Unión Europea o de otros 37 extracomunitarios. En ambos casos, se pedirá que no superen las 72 horas. Lo mismo ocurre para aquellos nacionales que quieran viajar a determinados destinos, en los que además se pueden exigir otro tipo de medidas como el confinamiento domiciliar.

Sin embargo, hay quienes quieren viajar a toda costa y buscan los medios adecuados para satisfacer las necesidades del sistema. De ahí que se haya notado un incremento de la compra y venta de test negativo falsos de COVID-19 en la deep web.

No es extraño escuchar, cada cierto tiempo, que ha caído la mayor red de pornografía o el mayor mercado de la droga de Internet. De hecho, es bastante común teniendo en cuenta las macrooperaciones policiales que se llevan a cabo tan sólo rastreando el bitcóin. Sin embargo, la realidad es que este internet oscuro existe y alberga todo tipo de bienes y servicios, que van desde la compra de pasaportes falsos a la contratación de matones. Ahora, también de PCR negativas falsas.

Tal y como señala Omicrono, a la posibilidad de comprar hidroxicloroquina o remdesivir hay que sumar una gran cantidad de usuarios que han comenzado a vender tanto pruebas rápidas para el coronavirus como test negativos falsos que sirvan de coartada ante las posibles exigencias laborales o de transporte. De hecho, ya se han detectado varios casos en Francia y Reino Unido.

En el primero, la policía ha detenido a siete personas que vendían certificados falsos en el aeropuerto Charles de Gaulle (París), en los que se aseguraba que la persona portadora no tenía el COVID-19. El precio, como informa la agencia AP, ascendía hasta los 300 euros en algunos casos. A eso, además, hay que sumar otro tipo de acuerdos en los que se ayuda a los interesados a coger vuelos, modificando los resultados de un conocido. “Puedes cambiar el nombre y la fecha de nacimiento por los tuyos. También puedes modificar la fecha de prueba para que esté dentro del límite de tiempo. Tan sólo hay que descargar el correo electrónico, cambiar los datos e imprimirlo”, aseguró uno de sus protagonistas a The Lancashire Telegraph.

La deep web, en cinco claves

  • La deep web acoge todos los datos que no están indexados por motores de búsqueda como Google o Yahoo. Aunque se trata de contenido muy difícil de rastrear y no se puede contabilizar de manera fiable, se estima que el 96% de internet se encuentra en ella. El 4% restante, lo que sí vemos, corresponde a la surface web.
  • Muchos sitios legales a los accedemos cada día no están indexados y pertenecen a ella. Ejemplos de ello son cuentas bancarias, revistas académicas o información sanitaria. Los motivos por los que estos contenidos no están indexados pueden ser muy variados: lo más normal es que sea por seguridad o por privacidad.
  • El navegador Tor no nació para proteger a los criminales. Se trata de un kit de acceso diseñado por el Laboratorio de Investigación Naval de Estados Unidos que se creó para garantizar el anonimato de personas perseguidas por regímenes dictatoriales. Sin embargo, no se puede obviar que hay quienes lo aprovechan para realizar actividades ilegales.
  • Podemos encontrar páginas que ofrecen drogas y armas, así como servicios de hacking y ajustes de cuentas, lo que atrae desde individuos curiosos hasta potenciales clientes. Lo que la mayoría de la gente no sabe es que, detrás de ellas, hay compradores y vendedores que resultan ser agentes de policía encubiertos.
  • Gran parte de los vídeos sobre la internet profunda que se difunden a través de YouTube son falsos. Es decir, aquellos que involucran muertes o violaciones son creados por el FBI para captar a aquellas personas que puedan tener la tentación de recrear una situación parecida. ¿El objetivo? Adelantarse a ellos y evitar cualquier intentona.