WhatsApp lo tiene claro: frente a la piratería, castigo. Desde el pasado junio, la aplicación está cerrando las cuentas de aquellos usuarios que comparten contenido ilegal entre sus contactos. En especial, aquellos que tienen que ver con piezas audiovisuales. Lo que ha comenzado ya en India como tres supuestos aislados podría extenderse muy rápido al resto del mundo.

Si bien es cierto que, gracias a la irrupción de las nuevas plataformas, las descargas ilegales de películas han decrecido muchísimo en los últimos años, aún sigue habiendo casos en todo el planeta. De ahí que la app de mensajería haya querido tomar cartas en el asunto: así, en caso de detectarlas, bloqueará a sus usuarios.

Por el momento, ya existen tres precedentes: en el país asiático, un tribunal ha obligado a la compañía a suspender el perfil de tres personas como sanción a un delito contra la propiedad intelectual. A este punto han llegado después de que la productora Zee Entertainment Enterprises detectase que la cinta Radhe: your most wanted bhaiestaba en circulación a través de esta vía.

Dicha denuncia se dirigió, previamente, a Facebook (propietaria de WhatsApp), que no se pronunció al respecto. Algo que podría cambiar dados los últimos movimientos jurisprudenciales.