Móviles

Contra la obsolescencia programada: Europa quiere que los móviles duren cinco años y Alemania, siete

La Comisión Europea estudia nuevas medidas para hacer más ecológicos móviles y tablets que entrarán en vigor en 2023

Con la nueva normativa que quiere sacar adelante la Comisión Europea, móviles como éste Samsung Galaxy S5 de 2014 aún estaría al día.
Con la nueva normativa que quiere sacar adelante la Comisión Europea, móviles como éste Samsung Galaxy S5 de 2014 aún estaría al día.La Razón

Imagínese un mundo en el que la obsolescencia programada fuera cosa del pasado. En el que su flamante iPhone 5s o Samsung Galaxy S5 comprado en 2014 aún recibiera actualizaciones de software en 2021 que lo mantuvieran seguro y funcional. Y además pudiera encontrar piezas de repuesto con facilidad a un precio establecido en 2014, para este caso. No solo pantallas o baterías, sino también conectores, altavoces, cámaras, micrófono… Una utopía para el cliente y una distopía para los fabricantes que tiene visos de hacerse realidad gracias a la Comisión Europea y, particularmente, a Alemania.

La Comisión Europea trabaja actualmente en un conjunto de nuevas regulaciones ambientales para teléfonos inteligentes y tablets. Lo que es mejor, en esta ocasión una nueva regulación medio ambientalno significa que el ciudadano de a pie vaya a terminar pagando más por algún novedoso concepto relacionado con la salvación del planeta, sino todo lo contrario.

Europa quiere aumentar la durabilidad de los dispositivos móviles hasta los cinco años. Esta durabilidad se refiere a las actualizaciones de seguridad, la longevidad de las baterías y la reparabilidad del terminal. No se olvidan de las actualizaciones de funciones, pero a éstas se les exigiría un plazo de tres años y no de cinco. Estas medidas se están estudiando en el marco de la Directiva sobre Diseño Ecológico que tiene previsto entrar en vigor para 2023.

Alemania, por su parte, es aún más ambiciosa y quiere que la Comisión Europea extienda esa durabilidad a los siete años para las actualizaciones de seguridad y las piezas de repuesto que, además, deberán estar a la venta “a un precio razonable” según explicó el Ministerio Federal de Economía al medio Heise.

iPhone 5s en proceso de reparación.
iPhone 5s en proceso de reparación.La Razón

Así de ecológicos serán los móviles con la nueva directiva

El objetivo de las medidas es reducir la contaminación y el consumo de energía que provocan la fabricación y uso de terminales móviles. Por ello, además de la obligatoriedad de las actualizaciones de seguridad durante cinco años y tres las de funciones, la Comisión Europea trabaja en los siguientes puntos:

· Las baterías de teléfonos inteligentes y tablets deberán mantener el 80% de su capacidad tras 500 ciclos de carga y ser reemplazables. Hay una excepción, pueden no ser reemplazables si tienen capacidad para 1.000 ciclos de carga.

· Los fabricantes deberán suministrar a los talleres de reparación profesionales piezas de repuesto (pantallas, baterías, cámaras, conectores, micrófonos, altavoces, mecanismos plegables para smartphones plegables) durante cinco años, seis en el caso de los tablets.

· Los precios de las piezas de repuesto deben ser públicos y no pueden aumentarse.

· Los terminales deberán poder soportar al menos 100 caídas desde un metro de altura, sin desperfectos, y también estar protegidos contra salpicaduras de agua.

Basta recibir un mensaje de texto para que espíen nuestro móvil
Basta recibir un mensaje de texto para que espíen nuestro móvilLa Razón

Una etiqueta energética para combatir la obsolescencia programada

Otra medida en la que trabaja la Comisión Europea es extender las etiquetas de eficiencia energética que emplean televisores y muchos electrodomésticos a los móviles y tablets. Está previsto que entren en vigor en 2023 y empleará la misma escala de la A la G con la que ya están familiarizados los usuarios. El razonamiento detrás de la medida es que los dispositivos más eficientes energéticamente tienen una mayor durabilidad y, por tanto, ayudan al medio ambiente dado que la etapa más contaminante de un móvil o tablet tiene lugar durante su fabricación.

La etiqueta energética también deberá mostrar la duración de la batería en horas, el número de ciclos de carga sin bajar del 80% de la capacidad original, la clase de protección IP (contra polvo y agua), la robustez y una valoración en puntos de su reparabilidad.

La respuesta de la industria

No muy entusiasta como es de esperar. La asociación Digital Europe que agrupa a fabricantes como Apple, Samsung o Huawei, se muestra mucho menos comprometida contra el cambio climático si afecta directamente a su modelo de negocio. Digital Europe ha propuesto que las actualizaciones de seguridad duren tres años y las de funciones solo dos. Considera que las piezas de repuesto disponibles deben ser solo las pantallas y baterías, rechazan la etiqueta energética y rebajan las exigencias sobre las baterías a mantener un 80% de su capacidad original tras 800 ciclos y no 1.000.