Trucos

12 formas de bajar la temperatura de casa en verano sin usar el aire acondicionado

Seguir estas pautas te ayudará a conseguir un ambiente más fresco y menos asfixiante en tu hogar durante los próximos meses de verano

Entre las ventajas de llenar la casa de plantas, está el que refrescan el ambiente gracias a su proceso de transpiración.
Entre las ventajas de llenar la casa de plantas, está el que refrescan el ambiente gracias a su proceso de transpiración.La RazónCortesía de Patrick Perkins / Unsplash.

La primera ola de calor del año comienza a atenuarse, pero sólo ha sido el primer aviso de lo que se nos viene encima con el verano que comienza el próximo martes. Buena parte de España volverá a ponerse por encima de los cuarenta grados en unas cuantas ocasiones de aquí a septiembre y, por eso, mantener unas pautas que ayuden a refrescar los hogares y a que no se conviertan en un horno, especialmente si no se dispone de aire acondicionado o resulta demasiado caro mantenerlo encendido, será tan necesario como ya lo ha sido esta semana. Te contamos doce formas sencillas y eficaces de bajar la temperatura de tu casa en verano.

Protégela del sol

Durante las horas del día en que el sol incida directamente sobre las ventanas y balcones de tu casa, cierra todo. Echa el toldo si lo tienes, baja la persiana, cierra la ventana e incluso las cortinas. Puede ser tentador mantener las ventanas abiertas con la esperanza de que pase una corriente, pero solo estarás dejando entrar más aire caliente del exterior.

Adapta la casa al verano

Lo que en invierno te ayuda a tener un hogar más cálido es un problema en verano. Descuelga las cortinas de invierno y pon unos visillos de un tejido ligero, preferiblemente de color blanco, y también puedes humedecerlas para conseguir un poco más de frescor. Retira también alfombras y cubiertas de sofá y en la cama emplea sábanas de algodón o seda que acumulan menos calor que otros tejidos.

Evita usar aparatos electrónicos

Todos generan calor, aunque no en igual medida. Los que más debes vigilar son ordenadores, un procesador puede alcanzar temperaturas por encima de los 90 grados en esta época del año, videoconsolas y los electrodomésticos de la cocina. Úsalos solo cuando lo necesites y mantenlos apagados si no es así.

Usa el extractor si cocinas

Si recurres a comidas frías y puedes evitar cocinar, evitarás una importante fuente de calor, pero si no es así acuérdate de emplear la campana extractora de aire que además de malos olores, también expulsa calor.

Enfríala con ventiladores y hielo

Una de las formas más efectivas de refrescar el viento es encendiendo un ventilador y poniendo delate un recipiente con abundante hielo. Por sí solo, lo único que hace un ventilador es remover el aire caliente, pero de esta forma lograrás enfriarlo.

Plantas, muchas plantas

Las plantas ayudan a refrescar el ambiente en el que se encuentran gracias al proceso de transpiración que realizan y por el que evaporan el agua de la superficie de las hojas gracias al calor que absorben. Por ese motivo, a más plantas, un ambiente más fresco.

Crea corrientes de aire, solo a primera o última hora del día

Lo mejor para crear corrientes es tener ventanas opuestas, pero más importante es la hora del día en que ventilas. Hazlo a primera hora de la mañana, antes de que suban las temperaturas demasiado, o a última hora del día, con el frescor nocturno. Durante el día solo conseguirás que entre aire aún más caliente en tu casa.

Cambia las bombillas por LED

Otra fuente de calor que pasa mayormente inadvertida son las bombillas. Si tienes incandescentes o halógenas cámbialas por las de tipo LED que consumen menos y generan menos calor.

Refresca el suelo

Ármate de una fregona y un cubo de agua bien fría y repasa bien todo el suelo. Es una buena idea hacerlo en el dormitorio antes de irse a dormir para conseguir un ambiente un poco más fresco.

Refresca la cama antes de dormir

Puedes utilizar bolsas de agua caliente rellenas de hielo tras dejarlas unas horas en el congelador. Distribúyelas en la cama y déjalas durante unos minutos antes de acostarte, la sensación cuando te acuestes será otra.

Cierra las puertas durante el día y ábrelas durante la noche

Manteniéndolas cerradas en las horas de mayor calor evitarás que circule el aire caliente por la casa y que desde las habitaciones que acumulen más calor se extienda al resto. Durante la noche, especialmente con corriente, ayuda a la refrigeración.

Usa bien el ventilador del techo

La mayoría de los motores de ventiladores de techo permiten el giro inverso. En verano, debes ponerlo para que gire en sentido contrario a las agujas del reloj. De esta forma, ayuda a que el aire caliente se desplace hacia el techo.