Tecnología bélica

Un “nuevo” protagonista en la guerra de drones: Irán

El país asiático lleva décadas usándolos y no solo vende su tecnología a Rusia, sino que es un negocio que está floreciendo. Y preocupando a otros.

Drones iraníes
Drones iraníesTania Nieto

Desde que comenzó la guerra en Ucrania, Rusia ha aprovechado los avances de un país que nunca se había tenido como protagonista de la tecnología de vehículos no tripulados o drones. Esto ha sido impulsado en gran medida por las sanciones que ha recibido el país: al no poder importar drones e incapaz de construir grandes aviones de combate, Irán se ha convertido en un especialista en drones de combate para una variedad de propósitos. Irán comenzó a probar drones en 1985 con los Mohajer-1 y Ababil-1. Espiaba las posiciones iraquíes detrás de las trincheras de primera línea y si era necesario, atacaba. Desde entonces el ecosistema de start-ups vinculadas a drones en Irán ha crecido notablemente.

Esta industria produce docenas de diferentes tipos de drones, desde aviones grandes con un alcance de miles de kilómetros hasta modelos tácticos lanzados a mano y municiones merodeadoras que llevan ojivas explosivas. Solo una firma, Oryx, tiene un catálogo de más de 200 modelos distintos, aunque muchos de ellos son prototipos que no han entrado en producción o se conocen solo por una descripción. De hecho se habla de que una empresa iraní habría abierto una fábrica de drones en Tajikistan.

El problema es que durante muchos años Estados Unidos ignoró esta capacidad de Irán y en las últimas semanas Rusia habría recibido más de un centenar (algunas fuentes hablan de varios cientos) de drones provenientes de Irán. Los modelos que habrían interesado a Putin son los Shahed-191 y Shahed-129, que se usaron en los conflictos en Irak y Siria.

El primero de ellos puede llevar 8 misiles Sadid-1 y aterriza sobre patines de aterrizaje retráctiles.Tiene una velocidad de crucero de 300 km/h, una autonomía de 4,5 horas, un alcance de 450 km y una carga útil de 50 kg. Alcanza los 8.000 metros de altura. El modelo 129, por otra parte, incorpora 4 misiles de precisión contra tanques. Y es un modelo muy buscado por fuerzas revolucionarias.

Estos drones iraníes podrían ayudar al ejército ruso a identificar objetivos para su vasto arsenal de artillería, así como ofrecer a Rusia medios adicionales para atacar a las fuerzas ucranianas, incluida potencialmente la artillería donada por Occidente.