Neurociencia

Elon Musk anuncia que Neuralink podrá implantar un chip en un cerebro humano en seis meses

La empresa, que tiene como objetivo que una persona pueda comunicarse con una computadora con el pensamiento, espera la aprobación de la FDA para iniciar los ensayos en humanos

Elon Musk, durante el evento Show and Tell de Neuralink.
Elon Musk, durante el evento Show and Tell de Neuralink.La Razón

Elon Musk anunció este miércoles que su empresa Neuralink espera poder implantar un dispositivo BCI (Brain Computer Interface o Interfaz Cerebro Computadora) en el cerebro de un humano en el plazo de seis meses. En un evento celebrado en la sede de la empresa en Fremont, California, el también propietario de Tesla, SpaceX y Twitter, mostró los avances logrados por Neuralink y señaló que la compañía ya ha realizado la mayor parte de los trámites con la FDA, Food and Drug Administration, encargada de regular el uso de medicamentos y productos médicos en Estados Unidos, para poder comenzar los ensayos en humanos.

El objetivo con el que trabaja Neuralink desde su creación en 2016 es el desarrollo de un chip que se pueda implantar en el cerebro humano para comunicarse con una computadora usando la actividad cerebral. Inicialmente, la compañía tenía previsto iniciar los ensayos en humanos en 2020, se retrasó a 2022 y ahora la nueva fecha es 2023.

Hasta ahora, el dispositivo BCI se ha probado en animales, principalmente monos aunque también se están haciendo pruebas de implantes en cerdos. En la presentación se pudo ver un vídeo de un mono controlando con la mente un juego tipo Pong delante de una pantalla mientras se alimenta a través de un tubo con batido de plátano. También escribir con un teclado virtual de forma telepática la frase “Bienvenidos a Show and Tell [nombre del evento]”, algo que Musk destacó que podría ser útil en el caso de personas parapléjicas o con esclerosis lateral amiotrófica que de esta manera podrían manejar un ordenador o un teléfono. Otras aplicaciones estarían enfocadas al monitoreo de la salud, de forma que, por ejemplo, podría detectarse de forma temprana una apoplejía porque con el chip implantado “verías los impulsos eléctricos del cerebro, algo así como un cortocircuito”.

Un mono con el chip implantado controla un juego de Pong con la mente mientras se alimenta.
Un mono con el chip implantado controla un juego de Pong con la mente mientras se alimenta.La RazónCortesía de Neuralink / YouTube.

El dispositivo BCI de Neuralink es del tamaño de una pequeña moneda y tiene múltiples cables del groso de un cabello que se insertan en el cerebro. “Es como reemplazar una parte de tu cráneo con un reloj inteligente, a falta de una mejor analogía”, dijo Musk, que también aseguró que él se pondría un BCI en el futuro.

Implantar un chip en el cerebro requiere una cirugía muy invasiva en la que se retira una pequeña parte del cráneo para conectar el chip al cerebro. Esta se lleva a cabo con un robot cirujano que puede ofrecer la precisión y rapidez necesarias para realizar este tipo de operación. “Imagínate quitarte un cabello de la cabeza y meterlo en gelatina cubierto con una envoltura de saran [un material plástico impermeable], hacerlo con la profundidad y precisión precisas, y repetirlo 64 veces en una cantidad de tiempo razonable” señaló Christine Odabashian, líder del equipo de inserción de hardware de Neuralink. El robot puede implantar esos 64 cables del chip en un cerebro en 15 minutos.

Una vez implantado, el dispositivo BCI de Neuralink traduce las señales neuronales en datos que pueden ser interpretados por una computadora a la que se conecta por Bluetooth. Para recargarlo de energía, la empresa está utilizando con los monos implantados un sistema de carga inalámbrica bajo el que permanecen sentados mientras se alimentan con el batido de plátano. Estos chips, además, recibirán actualizaciones para incorporar nuevas funcionalidades.

En el evento, que duro más de dos horas, también se hablo de otros implantes en los que trabaja Neuralink con diferentes aplicaciones médicas: uno para la columna vertebral que podría restaurar la movilidad en una persona paralítica y otro ocular para mejorar o recuperar la visión. Sobre el primero, Musk explicó que “por milagroso que parezca, estamos seguros de que es posible restaurar la funcionalidad de todo el cuerpo de alguien que tiene la médula espinal dañada” y sobre el segundo que “incluso si nunca han visto antes, estamos seguros de que podrían ver”.