El vehículo de zapadores Castor del Ejército supera las pruebas de calificación

El prototipo del vehículo de combate de zapadores (Vczap) Castor del Ejército de Tierraha superado las pruebas de calificación en las que se han puesto a prueba los diferentes equipos y sistemas del nuevo y esperado blindado para las unidades de ingenieros de la Fuerza Terrestre.

El Ministerio de Defensa ha comunicado el final con éxito de estos test. “La oficina del programa Pizarro ha dado por concluidas las pruebas de calificación del vehículo Castor con un resultado favorable”, explica.

El Plan de Calificación incluía diferentes pruebas sobre el prototipo como disparo con arma remota, apertura y señalización de brechas, excavación con hoja empujadora, comprobación de prestaciones, paso de zanja y vadeo, entre otras. El conjunto de pruebas realizado ha permitido completar la validación de los requisitos técnicos sobre el vehículo real y calificar el diseño del Vehículo de Combate de Zapadores (VCZAP).

Entregas entre 2023 y 2024

La superación del hito permite iniciar la fabricación de los 35 vehículos de la serie conforme al diseño aprobado. La entrega de estos vehículos está prevista que se inicie en el primer semestre de 2023 y se extienda hasta 2024.

En las pruebas de calificación ha participado personal de la empresa contratista, personal de la Oficina de Programa y se ha contado con el apoyo del Batallón de Zapadores X de la Brigada ‘Guzmán el Bueno’ X del Ejército de Tierra.

El programa Castor ha arrastrado varios retrasos relacionados con el aumento de peso del vehículo y los consiguientes efectos que esto implica en el grupo motopropulsor. El vehículo está basado en la barcaza de la plataforma Ascod 2 de GDELS Santa Bárbara Sistemas, una evolución, con mayor protección balística y antiminas, de la que ya utilizan los vehículos de cadenas de infantería Pizarro en servicio en el Ejército de Tierra.

Característica del “Castor”

El nuevo vehículo de los zapadores españoles cuenta con un sistema flexible automatizado para instalar en un único vehículo los distintos materiales requeridos por cada misión específica (pala, arado antiminas o rodillo antiminas) y está dotado con una torre remota “Mini Samson”de 12,70 mm de Rafael.

También dispone de una amplia capacidad de crecimiento, puesto que incorpora las preinstalaciones físicas que facilitarán la incorporación de equipos de misión que pudieran ser requeridos en un futuro, como un sistema de observación, sistema de mando y control, comunicaciones o protección adicional. Las entregas tendrá lugar dentro de la Fase II del programa “Pizarro”, que recoge la adquisición 36 unidades de esta versión por parte del Ejército de Tierra entre 2020 y 2021.

Este vehículo tiene un peso máximo en orden de combate de 33 toneladas, capacidad para transportar hasta nueve tripulantes, incluido el conductor, y la principal novedad frente a anteriores versiones del “Pizarro”es que cuenta con un mayor nivel de protección balística y antiminas.