Videojuegos

Alertan de la adicción a los videojuegos en verano

«Contienen elementos adictivos que se activan cuando los niños se dedican a intentar pasar de nivel», advierten los expertos

El lanzamiento de Pokémon Go ha disparado las alertas de adicciones a videojuegos. En la imagen, tres usuarios de móvil con el juego en el centro de Nueva York
El lanzamiento de Pokémon Go ha disparado las alertas de adicciones a videojuegos. En la imagen, tres usuarios de móvil con el juego en el centro de Nueva Yorklarazon

El presidente de la Asociación Catalana de Adicciones Sociales (ACENCAS), Francesc Perendreu, ha alertado del riesgo de adicción a videojuegos de los más jóvenes durante las vacaciones y ha advertido que ofertas como el exitoso ‘Pokemon Go’ «pueden causar graves riesgos para la salud», informa Efe

La asociación ha repartido un cuestionario para los padres para que se lo hagan responder a sus hijos para saber si están en situación de riesgo.

Entre las preguntas del cuestionario están si el niño juega cada día a videojuegos, cuántas horas lo hace, si lo hace por buscar excitación, si se muestra irritado si no puede jugar o si para hacerlo deja actividades deportivas o sociales.

Perendreu ha reconocido que los videojuegos pueden convertirse en una forma de entrenamiento para la mente, pero ha asegurado que «su excesivo uso, puede generar graves problemas de salud».

«Los videojuegos contienen elementos adictivos que se activan cuando los niños se dedican a intentar pasar de nivel y esto provoca una exagerada interactuación con estos dispositivos», ha subrayado el presidente de ACENCAS.

Según Perendreu, en casos de juego patológico los niños llegan a perder la noción del tiempo y de la realidad.

«La adicción provoca que no se realicen otras actividades sociales como actividad física, quedar con los amigos o jugar al aire libre. Se basa en un sedentarismo que conlleva obesidad infantil. Están constantemente frente a la pantalla. Una comida rápida y sin diálogo con el resto de la familia es la solución que aplican para no dejar de jugar», ha detallado Perendreu.

Igualmente, en casos de adicción, el niño puede sufrir alteraciones del sueño y un estado de nerviosismo constante por el uso exagerado de las consolas, según la asociación, que recuerda que el exceso de uso de los videojuegos puede provocar que los niños se enfrenten a un mayor aislamiento social.

«La ansiedad, la irritabilidad y la ira son otros de los síntomas que provoca la adicción, así como un elevado porcentaje de fracaso escolar», según Perendreu.

Según ACENCAS, el perfil más común es el de adolescentes varones de 12 a 20 años, y los síntomas de la adicción son: preocupación u obsesión por los juegos; fracaso reiterado al intentar dejar de jugar; dependencia emocional de jugar cada día, necesitar jugar más; buscar «ganar» a través del juego; y juegos asociados a porros y consumos de alcohol, en las franjas de edad superiores a los 16 años, en un 60 % de los casos.

Perendreu ha afirmado que «el adolescente juega básicamente para evadirse de los problemas familiares o escolares, así como para mejorar su estado de ánimo. Se trata de personas con una personalidad algo inmadura que buscan recompensas inmediatas, personas con baja autoestima y con una visión muy negativa o jóvenes que buscan emociones y riesgo».

«Estos jóvenes incrementan cada vez más el tiempo que dedican al juego, tanto para obtener las mismas emociones, como para paliar la irritabilidad y la ansiedad, que le provocan los intentos de dejar de jugar», ha añadido.

Perendreu ha recordado que «el 25 % de las solicitudes de las demandas de tratamiento en las asociaciones vienen dadas por las nuevas tecnologías.»

ACENCAS ha recomendado a los padres que ayuden a sus hijos a elegir juegos adecuados con los que también se puedan divertir y que hablen con ellos sobre el contenido de los juegos, para que puedan entender la diferencia entre la imaginación y la realidad.

También aconseja que eviten el juego solitario y que vigilen el juego obsesivo marcando un límite de tiempo para jugar y de días. EFE