Mensajería

Así es Signal, la aplicación por donde se comunicaban Koldo y Santos Cerdán

Este servicio permite que expertos independientes auditen su funcionamiento y detecten posibles vulnerabilidades

Así es Signal, la aplicación por donde se comunicaban Koldo y Santos Cerdán
Así es Signal, la aplicación por donde se comunicaban Koldo y Santos CerdánGoogle Play

La reciente polémica política en torno a los mensajes intercambiados entre Koldo y Cerdán ha vuelto a situar en el debate público una cuestión tecnológica de gran calado: ¿qué aplicación de mensajería protege mejor la privacidad de los usuarios? La respuesta, según los expertos en ciberseguridad, pasa por analizar no solo el contenido de los mensajes, sino también todo aquello que rodea a la comunicación digital.

Las aplicaciones WhatsApp y Signal emplean sistemas de cifrado de extremo a extremo, lo que significa que solo el emisor y el destinatario pueden acceder al contenido de los mensajes. Ni los empleados de Meta (propietaria de WhatsApp) ni los de Signal pueden leer lo que se escribe en una conversación privada. Esta tecnología, desarrollada inicialmente por Signal y adoptada posteriormente por WhatsApp, es considerada uno de los estándares más avanzados en materia de seguridad digital.

Sin embargo, la clave de la diferencia radica en los llamados metadatos: información adicional que acompaña a cada mensaje y que, aunque no revela el contenido de la conversación, sí permite saber quién se comunica con quién, cuándo, dónde y con qué frecuencia. Mientras Signal minimiza la recopilación de estos datos y no los almacena en sus servidores, WhatsApp sí lo hace, utilizando esta información para mejorar sus servicios, evitar el spam y, en ocasiones, para personalizar la publicidad en otras plataformas de Meta.

Signal, además, es una aplicación de código abierto, permitiendo que expertos independientes auditen su funcionamiento y detecten posibles vulnerabilidades. Esta transparencia refuerza la confianza de los usuarios y la reputación de la aplicación como referente en privacidad. Por el contrario, WhatsApp no permite este nivel de escrutinio externo y utiliza los metadatos para fines comerciales.

Es decir, aunque ambas aplicaciones protegen el contenido de los mensajes de forma robusta, Signal se sitúa como la opción más segura para quienes priorizan la privacidad, al limitar al máximo la recopilación y almacenamiento de datos personales. WhatsApp, por su parte, sigue siendo la app más popular, pero su modelo de negocio basado en la explotación de metadatos la sitúa en una posición de desventaja frente a Signal en materia de privacidad.