Inteligencia artificial
La CIA está desarrollando una IA para investigar la información de fuentes abiertas
Similar a ChatGPT, la herramienta ayudará a los analistas a procesar, en busca de pistas, la vasta cantidad de información pública que se genera
La CIA está desarrollando una herramienta de inteligencia artificial para ayudar a sus analistas a investigar la ingente cantidad de información de fuentes abiertas disponible. Esta herramienta será empleada también por el FBI, la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) y otras agencias dirigidas por ramas militares “pronto”, según ha publicado Bloomberg.
La IA, de la que no se conoce el nombre ni el modelo de lenguaje que emplea, será del estilo de ChatGPT. Un chatbot con el que se podrá conversar en lenguaje natural y que los analistas podrán usar para procesar la información OSINT en busca de pistas. Este tipo de inteligencia (Open-Source Intelligence, OSINT por sus siglas en inglés) se refiere a la recopilación, análisis y uso de información que está públicamente disponible y no clasificada. Puede provenir de una amplia variedad de fuentes accesibles al público en general: medios de comunicación, sitios web, redes sociales, documentos públicos, informes gubernamentales, libros, revistas y otras fuentes de información de acceso abierto.
Sin embargo, el medio señala que la Oficina del Director de Inteligencia Nacional de Estados Unidos ha expresado su preocupación por cómo las agencias de inteligencia recurren a mercados comerciales poco regulados para comprar grandes cantidades de datos sobre personas, incluida información de ubicación recopilada de teléfonos móviles. Esta información también es clasificada como de código abierto por la comunidad de inteligencia.
La herramienta de inteligencia artificial de la CIA permitirá a los usuarios ver la fuente original de la información que están consultando en un momento dado. Randy Nixon, director de la división de Inteligencia de Código Abierto de la CIA, considera que la interacción con un chatbot permite una forma más rápida de distribuir la información de inteligencia. “Luego puedes llevarlo al siguiente nivel y comenzar a chatear y hacer preguntas a las máquinas para que te den respuestas, también con fuente”, ha señalado.
Procesar la vasta cantidad de datos ya disponibles públicamente y que sigue aumentando diariamente es un desafío complicado y la CIA ha sido criticada en el pasado por su lentitud en aprovechar este tipo de fuentes. “La escala de cuánto recopilamos y lo que recopilamos ha crecido de manera astronómica en los últimos 80 años, tanto que esto podría ser desafiante y a veces inutilizable”, ha afirmado Nixon. Con la inteligencia artificial, los analistas podrán pasar a un proceso “en el que las máquinas te están proporcionando la información correcta, pueden resumir automáticamente y agrupar cosas”.
Este desarrollo tecnológico se enmarca en un contexto más amplío en el que Estados Unidos no quiere quedar por detrás de China, país que ha fijado 2030 como fecha para convertirse en el líder global en este campo.
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