Científicos chinos utilizan los satélites de Starlink para detectar aviones furtivos

Los aviones furtivos, sean chinos, rusos o estadounidenses comparten una tecnología que les permite ser “invisibles”: un recubrimiento absorbente de radar, formas y ángulos geométricos específicos que evitan que las ondas del radar regresen a la fuente y un motor que reduce su “firma” para no delatarse. Esto los hace casi indetectables… Hasta ahora.

Un equipo de científicos de la Universidad de Wuhan, liderados por Yi Jianxin, afirma que, utilizando la radiación emitida por la constelación de satélites de Starlink de SpaceX, pueden detectar aviones de combate furtivos enemigos.

El equipo de Jianxin utilizó un dron DJI Phantom 4 Pro como sustituto de un avión de este tipo para un experimento. Utilizando un sistema de radar terrestre, el equipo detectó el pequeño dron gracias a la radiación emitida por un satélite Starlink, que estaba volando sobre Filipinas en ese momento.

Eso es a pesar de que los aviones furtivos están diseñados para ser menos visibles para el radar y reflejar mejor la radiación electromagnética gracias a sus formas inusuales.

El equipo afirma que su nuevo método de detección "no se ve afectado por la forma tridimensional del objetivo y el material de la superficie", según un estudio publicado en el Journal of Signal Processing.

Eso significa que el sistema podría "proporcionar ventajas significativas en la detección de objetivos pequeños y furtivos", lo que supondría una posible ventaja para el ejército chino en el campo de batalla. Esta idea es que cuando un avión pasa entre un satélite y una antena en tierra, puede dispersar las ondas electromagnéticas del satélite, ondulaciones que pueden ser captadas por un radar terrestre para identificar objetivos.

Gracias a los más de 6 mil satélites Starlink que SpaceX ha lanzado hasta ahora, el equipo de Jianxin espera utilizar las perturbaciones en las señales de radio de alta frecuencia para rastrear aviones furtivos.

Se trata de una nueva vía de investigación sorprendente, especialmente dada la animosidad china hacia la constelación de banda ancha de la empresa dirigida por Elon Musk. En 2022, el South China Morning Post informó que los investigadores chinos estaban desarrollando formas de derribar los satélites Starlink si alguna vez se convirtieran en una amenaza para la seguridad nacional.