Defensa

Rusia sigue incorporando con cuentagotas nuevas unidades de su caza de quinta generación Su-57, el rival directo del F-35

Rusia dice que tendrá su primer regimiento completo con estos cazas a principios de 2024, aunque parece probable que no sea más que propaganda

Imagen de un Su-57 en pleno vuelo
Imagen de un Su-57 en pleno vueloDe Anna Zvereva from Tallinn, Estonia - Sukhoi Design Bureau

La Fuerza Aérea rusa habría recibido nuevas unidades del caza de quinta generación Su-57, según ha informado el viceprimer ministro del país, Denis Manturov. Los aparatos, fabricados por Komsomolsk en la planta de aviación de Amur, ubicada en el Lejano Oriente de Rusia, se han incorporado tras una ronda completa de evaluaciones y pruebas de fábrica.

A pesar de la propaganda rusa respecto de su avión más avanzado técnicamente, las unidades llegan con cuentagotas. De hecho, estos nuevos, cuya cantidad no se ha desvelado, serían los primeros entregados este año, aunque estaría prevista una nueva entrega para finales de año, siempre que la falta de suministros debida al embargo no retrase aún más la fabricación, según confirmó Yury Slyusar, presidente de la Russian United Aircraft Corporation.

Los distintos fabricantes aeronáuticos rusos, filiales de Rostec, han suministrado recientemente una serie de aviones Su-57 y Su-35 a la Fuerza Aérea Rusa como parte de la Orden de Defensa del Estado en curso.

Yuri Slyusar, director general de la UAC, informó que los restantes aviones de quinta generación que se entregarán a final de año se están sometiendo actualmente al proceso de montaje final y a las pruebas necesarias en la estación de vuelo. Además, este año se ha producido el suministro del tercer conjunto de Su-35S, y los siguientes aviones se han preparado para una producción inminente.

Inicialmente, la Fuerza Aérea Rusa solo habría recibido un Su-57 en 2020, seguido de tres en 2021 y un aumento de seis en 2022. Sin embargo, el actual Plan Estatal de Armamento predice que el tamaño de la flota debería alcanzar los 22 cazas a finales de 2023. lo que implica la necesidad de 12 nuevos combatientes dentro de este año.

En cuanto a este último lote de aviones, aunque no se ha informado del número, la entrega de seis aviones en dos lotes distintos es un plan potencial que se está considerando. El objetivo previsto es producir cerca de una veintena de 20 fuselajes por año tanto para uso interno como para exportación.

Misiones de ataque del Su-57

Características del Su-57

El avión ruso tiene entre sus principales virtudes, al menos sobre el papel, la autonomía de vuelo, la velocidad, la propulsión y la maniobrabilidad. Está capacitado además para realizar despegues y aterrizajes en pistas cortas.

Según la web Galaxia Militar, el 25% de la masa total del avión es de materiales compuestos porcentaje que alcanza el 70% en lo que se refiere a la superficie, lo cual, además de reducir su peso, lo hace casi invisible a los radares enemigos.

Está diseñado, según explica Sukhoi en su página web, para destruir todo tipo de objetivos aéreos en combate de corto y largo alcance, destruir objetivos de superficie, superar sistemas de defensa aérea enemigos, monitorear el espacio aéreo a grandes distancias o destruir el sistema de control de acciones del aviones enemigos. Asimismo, aseguran que cuenta con “el más moderno complejo de equipos radioelectrónicos a bordo”. “El PAK FA es el avión más avanzado en la línea de productos de la compañía Sukhoi”.

El caza ruso es capaz de llevar a cabo misiones ocultas debido a su bajo nivel de visibilidad a los rayos X, infrarrojos y rangos visibles. Además, el equipo a bordo permite el intercambio de datos en tiempo real con los sistemas de control en tierra y realizar tareas de forma autónoma.

Podrá transportar armas internas bajo la estructura central del avión, en una bahía de carga interna, instalada en medio de los motores gemelos, con capacidad de transportar 5 misiles “aire-aire” de corto alcance, montados en un lanzador rotatorio opcional detrás del asiento del piloto, entre las toberas de entrada de aire. Podría disponer además de pun de anclaje en cada ala para cuatro misiles “aire-aire” de largo alcance, para la interceptación de objetivos lejanos fuera del rango visual del piloto.

Además, fuentes militares rusas aseguran que una versión mejorada y modernizada del Su-57 va a comenzar a ser producida en serie a partir del 2025. La modernización se encuentra enmarcada dentro del programa de desarrollo de nombre Megalópolis. Según la agencia Tass, entre las principales mejoras se encuentra la incorporación del motor de segunda etapa, el Izdelie 30, y la renovación y actualización del cockpit, seguramente para unificar todo lo que se pueda la producción del Su-57 con la del S-75 Checkmate. En fechas recientes, medios de prensa rusos informaron que se estaba trabajando en tecnologías para que varias funciones puedan ser controladas mediante la voz y la vista. Al momento se desconoce si los aviones que se comiencen a entregar a partir del 2025 contarán con estas capacidades.

Una de las principales críticas vertidas contra Rusia es la presencia testimonial de este avión en la guerra de Ucrania. Aunque Moscú presume de haberlo usado en distintas operaciones dentro de Ucrania, militarmente hablando, su ausencia está suponiendo una gran decepción después de que el Kremlin hubiese pregonado una y otra vez la avanzada tecnología de su caza el cual, aseguraban, podía superar (hasta ahora solo sobre el papel) a los F-22 y F-35 de Estados Unidos, estos sí probados en acción numerosas veces y, en el caso del segundo, en servicio también en otros países.

Rusia, sin embargo, insiste en que ha sido usado en misiones de ataque, supresión de defensa aérea y, según varios relatos, también combate aire-aire.

Desarrollado como sucesor del Su-27 Flanker y sus variantes, el diseño del Su-57 se centró en evitar el enorme aumento del coste de vida observado en los programas de cazas estadounidenses de quinta generación. Esta escalada financiera hizo casi imposible que el F-35 reemplazara a los cazas de cuarta generación sin reducir drásticamente el tamaño de la flota o aumentar significativamente los gastos.

Por el contrario, se prevé que el Su-57 sea un avión relativamente más rentable de operar en comparación con sus predecesores. Se espera que esto facilite su adopción generalizada por parte de las unidades de primera línea y permita la formación de nuevos regimientos.

Estaría previsto que Rusia forme su primer regimiento Su-57 con fuerza completa a principios de 2024 y dos regimientos adicionales previstos para finales de 2027, pero tampoco parecen muy fiables estas previsiones, pues se lleva hablando años de la producción de este avión y su número sigue siendo tremendamente reducido.

En octubre hará un año de que se probará la versión mejorada del Su-57. Se le incorporó un conjunto de equipos a bordo con funcionalidad extendida, apoyo inteligente a la tripulación (inteligencia artificial) y la posibilidad de utilizar una amplia gama de nuevas armas. También es posible instalar el motor de la segunda etapa en el avión. Este apoyo inteligente a la tripulación permite que el ordenador de a bordo lleve a cabo tareas de copiloto, lo cual permite al piloto verse liberado de tareas para que puede centrarse en tareas críticas. Para ello, la tecnología incorporada es capaz, no solo de asumir el pilotaje, sino del uso del armamento, según Yuri Slyusar, director general de la UAC.

Pero esta tecnología tiene como objetivo ir un paso más allá y permitir al piloto del aparato controlar el avión con movimientos oculares o con comandos de voz. De hecho, en la actualidad se trabaja en que el software aprenda, no ya tanto comandos de voz prefijados, sino entender el contexto para que, en condiciones extremas, “el piloto no necesite recordar exactamente qué frase debe pronunciar”.

Otra de las claves del Su-57 es su motor. El avión fue lanzado con un motor provisional, un NPO Saturn Product 117, derivado de los turboventiladores de postcombustión del AL-41F-1S desarrollados para el Su-35. Ahora, parece que al fin podría incorpora los motores Izdeliye-30, que le permitirían navegar a velocidad supersónica sin el uso de postquemadores que consumen mucha gasolina. Este nuevo motor mejorará el empuje y la eficiencia de combustible del caza y reducirá los requisitos de peso y mantenimiento.

Sin embargo, a pesar de su potencial, la producción no ha hecho más que acumular retrasos importantes durante la década de 2010. Originalmente, la Unión Soviética estaba programada para presentar sus cazas de quinta generación en 2001 bajo los auspicios del programa MiG 1.42. Sin embargo, las consecuencias de la disolución de la Unión Soviética supusieron un importante revés para la industria.