Stephen Fry denuncia que una IA robó su voz de los audiolibros de Harry Potter para narrar un documental

La Inteligencia Artificial (IA) ha experimentado un rápido avance en los últimos años y se ha convertido en una herramienta poderosa en diversos campos. Sin embargo, también plantea una serie de riesgos que deben abordarse y comprenderse adecuadamente antes de que sea demasiado tarde. Uno de los riesgos más evidentes de la IA es el uso inapropiado de su capacidad incomparable para recopilar, analizar y predecir el comportamiento humano.

Esta herramienta, cuando se utiliza para fines deshonestos, puede resultar en situaciones que afecten gravemente la libertad individual, la autonomía de las personas, así como su imagen y seguridad. Uno de los temores más comunes es que la inteligencia artificial llegue a reemplazarnos o use nuestra imagen y voz para crear contenido falso o engañoso. Y no es un temor irracional. De hecho, ya ha habido víctimas de este problema.

La última víctima de esta tecnología ha sido el actor y escritor británico Stephen Fry, quien afirma que su voz se utilizó en un documental en el que nunca participó: "Lo que han escuchado no es el resultado de una mezcla. Es una voz artificial flexible, en la que las palabras se ajustan al significado de cada frase", explicó. "Utilizaron mi lectura de los siete volúmenes de los libros de Harry Potter, y a partir de esos datos crearon una IA de mi voz que hizo esa nueva narración", denunció.

Ahora bien, es cierto que el uso de estas voces con fines comerciales o de entretenimiento sin el consentimiento de una persona puede violar gravemente sus derechos. Sin embargo, este es el menor de los problemas que esta tecnología podría llegar a generar. Su potencial para crear propaganda política e influir en la opinión pública es enorme. Entre otras cosas, esta tecnología puede usarse para difundir información falsa o crear confusión haciéndose pasar por otra persona, dañando la reputación y la confianza del público en individuos u organizaciones.

En este sentido, el actor advierte de que "por ahora solo son audios, pero no debe pasar mucho tiempo antes de que los 'deepfake' sean igual de convincentes". "Podrían hacerme leer cualquier cosa, desde un llamado a asaltar el parlamento hasta contenido pornográfico duro. Todo esto sin mi conocimiento ni mi permiso", expresó. "Es un momento verdaderamente extraño para estar vivo", concluyó.