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Crítica de «Tales from the Loop»: El futuro pasa de largo

La cautivadora serie antológica de Amazon Prime sugiere que los avances tecnológicos no suplirán nuestras necesidades más genuinamente humanas

Los escenarios de «Tales from The Loop» están basados en las ilustraciones de Simon Stålenhag
Los escenarios de «Tales from The Loop» están basados en las ilustraciones de Simon StålenhagMarc Berry Reid

A lo largo de los últimos años, el sueco Simon Stålenhag ha logrado un éxito considerable gracias a una propuesta artística que mezcla idílicas escenas pastorales con arquitectura retrofuturista, maquinaria desechada y tecnología alienígena. Ahora, su trabajo–inspirado en el de creadores como Ralph McQuarrie, uno de los ideólogos visuales de «Star Wars», y Syd Mead, que contribuyó a diseñar el look de «Blade Runner» y el de «Alien»– es el modelo sobre el que se basa «Tales from the Loop», una colección de ocho cuentos en los que la vida rural cotidiana se ve matizada por lo sobrenatural y en los que robots y tractores y viajes en el tiempo y autopistas y granjas comparten plano. La ciencia ficción, eso sí, nunca toma el protagonismo; como en las imágenes de Stålenhag, sus significantes se mantienen al fondo, abandonados entre los campos o escondidos detrás de los árboles. La serie la utiliza para fijarse en un grupo de seres humanos que siguen viviendo vidas mundanas pese a estar rodeados de lo extraordinario.

Jonathan Pryce en "Tales from the Loop"
Jonathan Pryce en "Tales from the Loop"Jan ThijsAmazon Studios, Prime Video

Para ello, funciona a modo de antología. Aunque presenta un elenco recurrente de personajes y una serie de tramas que se solapan, cada episodio funciona como una historia independiente. Transcurre en una localidad de Ohio construida sobre el Loop, un centro subterráneo de investigación experimental que profundiza en los misterios del universo y, al parecer, permite que lo imposible sea posible. Si bien emplea a la mayoría de los vecinos trabajan allí, pocos saben exactamente qué sucede en su interior. En todo caso, el Loop ha cambiado sus vidas de varias maneras, tanto a través de avances tecnológicos –implantes cibernéticos, tractores flotantes, energía limpia– como de fenómenos inexplicables como objetos que aparecen de la nada o fluctuaciones en el espacio y el tiempo. En un episodio, la madre de una niña desaparece y deja tras de sí un extraño artefacto; en otro, un niño escucha voces provenientes de una esfera; en otro, un hombre se encuentra consigo mismo en un universo paralelo. Los ciudadanos del pueblo han llegado a aceptar ciertas cosas como ordinarias, y eso evita a la serie la necesidad de extenderse en explicaciones pseudocientíficas. En realidad, decimos, se interesa más por asuntos como el paso del tiempo, la muerte, la pérdida, la maternidad y, sobre todo, la soledad y la necesidad de conexión humana. Justo como el arte de Stålenhag, pues, es una ficción llena de melancolía.

En cualquier caso, «Tales from the Loop» no adopta el tipo de actitud tremendista o disuasoria respecto a la tecnología que sí es evidente en «Black Mirror». Las historias que la componen, en cambio, resultan extrañamente reconfortantes; en primer lugar, por la belleza que derrochan a través de imágenes de estanques cubiertos de nieve y escenas de conversaciones nocturnas iluminadas por cientos de luciérnagas; en segundo lugar, porque, en última instancia, muestran a un grupo de personajes que, de no estar inmersos en circunstancias tan excepcionales, llevarían más o menos la misma vida. Son gente que siguen trabajando en empleos sin futuro, que tienen dificultades para labrar sus tierras y que no ven a los seres queridos lo suficiente. La tecnología, nos sugieren, no tiene las respuestas. Para intentar llenar el vacío que nos consume seguimos necesitando a los demás.

Por qué hay que verla, o por qué no: porque tanto por su tono, como por su ritmo como por su actitud frente a la tecnología, es distinta de cualquier otra serie de ciencia ficción actual.
El mayor acierto: la fidelidad con la que captura la extraña belleza de las obras de Simon Stålenhag en las que se basa.
Si le gusta también puede ver... títulos como “La dimensión desconocida”, “Black Mirror”, “Stranger Things”, “Dark”, “Humans”, “Westworld” y “Colony”.
El dato: sus episodios han sido dirigidos por sendos nombres consagrados como Ti West, Mark Romanek, Andrew Stanton y Jodie Foster.
Escena de "Tales from the loop"
Escena de "Tales from the loop"Jan ThijsPhoto: Jan Thijs 2019