Cristina Fernández

Cristina Fernández: «La Prensa del corazón tiene que recuperar credibilidad»

Es la conductora de la sección de crónica social en «La mañana de La 1» sin perder sus señas de identidad: rigor e información veraz

Cristina Fernández. conductora de la crónica social de "La mañana de La 1"
Cristina Fernández. conductora de la crónica social de "La mañana de La 1"RTVELa mañana de la 1

Lleva los suficientes años especializada en la crónica social para saber que no es una temática frívola. ¿Entretenida? Sí, pero no es necesario que sea superficial. Sabe que hay que picar piedra para lograr la confianza de las «celebrities» con el fin de que le concedan entrevistas y que la información sea rigurosa; nada de poner por delante un titular que luego no tenga contenido. Desde julio, brinda a la audiencia de «La mañana de La 1» su experiencia y su frescura para hablar de los famosos y sus circunstancias. Y los espectadores no le están dando la espalda.

–Cuando recibe la oferta de TVE, ¿qué es lo primero que les pidió?

–Hacer lo que quisiese, Recuperar las historias, la trayectoria de personajes que tienen algo que contar. Creo que es imprescindible el contenido del corazón en el área de entretenimiento de la televisión.

–Usted prefiere, antes que un titular explosivo, darle un contexto al espectador para que se forme su opinión. ¿Me equivoco?

–Sobre todo soy rigurosa. Puedo contar menos, pero todo lo que digo es cierto y está contrastado. Es algo que tiene que recuperar este tipo de Prensa: una información veraz, al igual que ocurre con la actualidad política o de sucesos. Y para eso es importante que los famosos crean en ti, que sepan que respetas el «Off the record». Se puede y se debe recuperar la credibilidad.

–¿Teme que le comenten y le critiquen que es «blandita» con sus entrevistados?

–Es que el «corazón duro» no sé lo que es... ¿Faltarle el respeto a la gente? María Teresa Campos, a la que considero una maestra, llevaba a su programa a un montón de famosos, pero nunca vi que maltratase a nadie. Preguntaba lo que debía pero con educación. Igual le pasa a otra persona que admiro: Mercedes Milá. Es valiente y arrojada, pero no fuerza la máquina.

–Si hace tres meses nos dicen que Enrique Ponce y Paloma Cuevas se separan porque él quiere formalizar su relación con Ana Soria... ¿Qué cuerpo se le hubiese quedado?

–¡Ufff! Este tema me tiene en «shock». Yo puedo entender que, como dice la canción, «cuando el amor viene de esa manera...». Desde el respeto absoluto, lo que asombra es cómo Ponce y Soria lo están viviendo. Igual es innecesario este exhibicionismo en las redes sociales. Por no hablar del cariño que todos tenemos a Cuevas. Pero insisto: hay que ponerse en su lugar, a pesar de que llame la atención que Ponce esté tan desatado.

–¿Cómo se gestiona hablar del mazazo que ha sufrido Ana Obregón?

–En nuestro programa lo único que hemos difundido son sus publicaciones en las redes sociales y el otro día tocamos el tema de Antonia Dell’Atte y sus reacciones tras ver «Lazos de sangre». Me resulta muy doloroso hablar de ella. Creo que es la noticia más triste que hemos tenido que contar de las «celebrities» en años porque la tenemos mucho respeto y Aless era fantástico. Tiene que tener en cuenta que en mi parcela del programa hay que tratar los temas con alegría, quitarle muchas veces hierro a los asuntos... Pero con ella es imposible. No me puedo imaginar levantarme todas las mañanas viviendo lo que siente Obregón ahora.

–¿Tiene algún personaje en el tintero?

–Doña Letizia. Siempre es noticia. También Miguel Bosé, además del tema personal con sus hijos, ha perdido a su madre y ofrece pocas entrevistas.