Los creadores de Rojadirecta, a juicio por piratería con fianza de 4 millones de euros

El creador de rojadirecta.com será juzgado por un delito continuado contra la propiedad intelectual y deberá hacer frente a una fianza de 4 millones de euros o al embargo de sus bienes.

El Juzgado de Instrucción 1 de La Coruña ha dado por concluida la instrucción y ha ordenado la apertura de juicio oral contra el administrador de las webs ilegales, su sociedad Puerto 80 Projects y otros cinco acusados de delitos continuados contra la propiedad intelectual, a través del portal rojadirecta.com y similares, y por los beneficios obtenidos con esta actividad ilícita.

La juez aprecia suficientes indicios de delito para trasladar la acusación a la Audiencia Provincial de La Coruña que deberá establecer la fecha para el inicio de las vistas orales. La juez fija, además, una fianza de 4 millones de euros al creador de rojadirecta.com y a su sociedad Puerto 80 Projects para hacer frente a posibles responsabilidades derivadas de su actividad ilícita y dada la “especial transcendencia económica” de las ganancias obtenidas y los perjuicios causados, según las conclusiones del fiscal.

Con anterioridad, la juez decretó ya el bloqueo de varias cuentas bancarias de la sociedad de la que es propietario. Junto a la cabeza de rojadirecta.com, también serán juzgados como coautores y colaboradores hasta cuatro acusados más en sus actividades delictivas, y un acusado más como autor de un delito de facilitación de acceso a servicios de radiodifusión sin autorización del prestador.

El fiscal, en su acusación solicita 4 años de cárcel para el creador de rojadirecta.com y penas de 2 años y 3 meses para el resto de los acusados. El fiscal también solicita el cese de la actividad de las webs señaladas y ordena a los prestadores de servicios que suspendan la transmisión, el alojamiento de datos, el acceso a las redes de telecomunicaciones o la prestación de cualquier servicio que les permita seguir pirateando contenido protegido por la propiedad intelectual.

Las acusaciones particulares de LaLiga y Mediapro elevan la pena de prisión para el administrador del portal ilegal a los 6 años, y solicitan una multa de más de seis millones de euros y la pena de disolución para Puerto80, la persona jurídica titular del dominio.

Antecedentes

Las actividades del principal acusado como creador y promotor de webs pirata se iniciaron a principios de este siglo con la creación de rojadirecta.com. La web ofrecía un listado de enlaces donde podía verse gratis contenido deportivo comercializado por LaLiga o Canal +, entre otros. Aunque para el usuario el acceso a la web era gratuito, se obtenían ingresos millonarios a través de la publicidad o del cobro de comisiones por desviar tráfico a portales de casas de apuestas deportivas, como ha quedado demostrado en otras causas judiciales.

En sus inicios, en 2005, la web solo ofrecía fútbol y durante los dos primeros meses se alcanzaron los dos millones y medio de visitas. Posteriormente fue añadiendo otros deportes como voleybol, baloncesto, tenis, balonmano... En 2011 llegaron las primeras denuncias desde Estados Unidos y le fue retirado el dominio .org y .com, pero dos años después los recuperaron y volvieron a las andadas.

En España en 2007 la web fue denunciada por Audiovisual Sport por vulnerar la propiedad de intelectualidad, por aquel entonces rojadirecta gano el juicio y la apelación en 2010. En Francia fue en 2015 cuando la Justicia les obligó a retirar los enlaces de la Liga 1 y 2 y a pagar una indemnización y a publicar que estaban actuando ilegalmente, algo que hicieron en el blog.

Informes judiciales evidenciaron ingresos de más de 11 millones de euros en una de las cuentas de la sociedad. El proceso penal arranca en 2015 con la denuncia de DTS contra el creador de rojadirecta.com y Puerto 80 Projects. Tanto LaLiga como Mediapro se personaron como perjudicados en el proceso. En 2016, y después de prestar declaración, fue detenido y puesto en libertad con la obligación de presentarse en el juzgado todos los meses y bloquear sus cuentas a la espera de finalizar la investigación.