Restaurantes

¿Es legal cobrar por cortar una tarta de cumpleaños? Esto fue lo que le ocurrió a unos comensales en Ibiza

El equipo de 'Espejo Público' quiso averiguar la ética detrás de esta práctica tras conocer que la tarifa por el servicio ascendía hasta los 30 euros

Jesús Soriano durante la emisión de 'Espejo Público'
Jesús Soriano durante la emisión de 'Espejo Público'Atresmedia

Los cumpleaños siempre han sido un verdadero motivo de celebración. Reunir a familiares y amigos para festejar la vida de una persona es una tradición tan antigua como la humanidad misma. Lamentablemente, la organización de la fiesta puede terminar provocando algún que otro dolor de cabeza. Y eso mismo le terminó pasando a un grupo de comensales en Ibiza.

Decididos a celebrar la comida de cumpleaños en un restaurante de la isla, los asistentes llevaron su propia tarta al establecimiento, y le pidieron a los encargados el favor de cortarla. Buena comida, risas y sobremesa; estaba saliendo todo a pedir de boca. Pero claro, llegó la temida cuenta, y con ella la sorpresa de que el restaurante había cobrado 30 euros por cortar una tarta que no se había preparado allí.

¿Hay una norma que impida cobrar por este servicio?

Durante la tertulia de 'Espejo Público', el equipo del programa ha tenido la oportunidad de conversar con Jesús Soriano, conocido en redes sociales como SoyCamarero. A través de su perfil de X (antiguamente Twitter), Soriano recoge algunas situaciones que pueden llegar a resultar inverosímiles en el mundo de la hostelería.

Al ser preguntado acerca del servicio cobrado por el restaurante en cuestión, el camarero ha dejado ver un cierto vacío legal. "Si está especificado en carta podría ser legal, porque al final lo que te están cobrando es el servicio", comenta Soriano. Dentro de este servicio se puede incluir también el hecho de llevar los platos, las cucharas y utilizar la cubertería para un plato que no fue preparado en el restaurante.

"En este caso no fue avisado, así que me parece un poco raro", destaca el experto hostelero, quien ha tildado la noticia de "barbaridad". Según Soriano, este tipo de situaciones está viéndose cada vez con más frecuencia, convirtiéndose a largo plazo en una tendencia que puede ir en contra de esa "visión empresarial" de tener al cliente contento.