Tras la compra

Netflix apuesta por una estrategia radical: Warner seguirá trabajando con otras plataformas

La plataforma confirma que no bloqueará la venta de contenidos a rivales y da un giro sorpresivo en su modelo de negocio

Trump advierte de un posible problema de monopolio en la compra de Warner Bros por parte de Netflix
Trump advierte de un posible problema de monopolio en la compra de Warner Bros por parte de NetflixEuropa Press

Netflix ha hecho algo que, hace solo unos años, parecía impensable. Tras anunciar la adquisición de Warner Bros. Discovery por 83.000 millones de dólares, la compañía ha confirmado que Warner Bros. Television seguirá vendiendo series a otras plataformas, sin restricciones. Lo ha dicho alto y claro Ted Sarandos, co-CEO del gigante del streaming: "No vamos a cerrar ese grifo. Es un negocio saludable y no pensamos tocarlo".

Hasta ahora, Netflix se había mantenido al margen de producir contenido para terceros. Pero con la compra de Warner, la situación ha cambiado de raíz. Ahora también son dueños de uno de los estudios más prolíficos de la industria, y no parece que vayan a encerrarlo en su propio jardín. Al contrario: piensan dejar que siga creciendo, incluso si eso significa alimentar a la competencia directa.

Detrás de esta decisión hay un nombre clave: Channing Dungey. La actual presidenta de Warner Bros. Television Group tiene un historial de éxitos que incluye títulos como "Bridgerton" o "Inventing Anna". Netflix sabe lo que tiene entre manos y no quiere frenar a quien ya demostró cómo se fabrican éxitos globales, aunque eso implique compartir la tarta.

Mientras otros cierran catálogos y restringen licencias, Netflix abre las puertas. HBO, Apple TV+, NBC, ABC o Bravo han emitido producciones firmadas por Warner Bros. TV, y todo apunta a que eso seguirá ocurriendo. Series como "Ted Lasso", "Colegio Abbott" o "All American" nacieron de ese modelo abierto. Y con el respaldo de Netflix, podría multiplicarse.

Además, Warner no es una recién llegada al ecosistema de Netflix. Ya produce para la plataforma series como "The Sandman" o "Una nueva jugada", y esa colaboración no solo continuará, sino que podría reforzarse. El acuerdo consolida a Netflix como el único actor del mercado que, además de tener contenido propio, controla un estudio que alimenta a todo el sector.

Lo curioso no es que Netflix haya comprado Warner. Lo realmente llamativo es que, tras la compra, no quiera convertirlo en una máquina exclusiva para su catálogo. En un momento donde todos quieren blindarse, Netflix ha optado por abrir. No es solo una estrategia empresarial: es una declaración de principios.