Entrevista

Gotzon Mantuliz: "Estoy muy orgulloso de llevar un programa sobre naturaleza al prime time"

En 'Cazadores de imágenes', el presentador vizcaíno y seis invitados recorrerán el mundo para fotografiar animales salvajes

Gotzon Mantuliz debuta esta noche en laSexta con 'Cazadores de imágenes'
Gotzon Mantuliz debuta esta noche en laSexta con 'Cazadores de imágenes'Atresmedia

Sólo hay que asomarse al perfil en Instagram de Gotzon Mantuliz (Getxo, 1988) para descubrir y fascinarse con sus fotografías. El vizcaíno ha recorrido medio mundo capturando instantáneas de los animales más increíbles en su hábitat natural. Esta noche estrena en laSexta «Cazadores de imágenes», donde acompañado de varias caras conocidas de la televisión viajará a cuatro continentes para lograr esta hazaña. LA RAZÓN ha charlado con él.

¿A qué lugares nos llevará este «Cazadores de imágenes»? ¿Y qué especie tendrán como objetivo en cada uno?

Hemos estado en la Baja California para fotografiar a las mobulas (rayas), que se juntan en el mar de Cortés, en Uganda para encontrar a los gorilas de montaña, en Brasil buscando al jaguar, en las Maldivas a la caza del tiburón tigre, en la Sierra de Andújar tras los pasos del lince ibérico y en Alaska intentando inmortalizar a los osos grizzly.

¿Cuál ha sido más difícil de inmortalizar?

Cada uno tiene sus complicaciones. Curiosamente, en Andújar, el encuentro con el lince nos costó mucho. Estuvimos cinco días sin ver prácticamente nada y, al final, el último día acabamos pudiendo fotografiarlo con bastante buena calidad. Fue un poco frustrante, porque era el primer programa que grabábamos, y pensábamos: «si todos van a ser así, vamos a acabar muertos del estrés». Hay muchas cosas que dependen de la naturaleza, entonces hay que armarse de paciencia y confiar. A nivel técnico, quizá lo más difícil que hicimos fue en Brasil. Íbamos con idea de fotografiar al jaguar —y lo conseguimos—, pero también conseguimos una foto de una anaconda de ocho metros bajo el agua, en una zona bastante compleja para bucear, porque había mucho fango. En cuanto te movías, se creaba una nube de barro y no se veía nada, así que era una oportunidad fugaz. A nivel técnico, para grabar eso, fue complicadísimo, y estoy muy orgulloso de cómo lo hizo el equipo.

Los invitados que le acompañan están lejos de encontrarse en su «hábitat natural». ¿Cómo los ha visto?

Me han sorprendido mucho. Yo era muy consciente de la exigencia que tiene lo que hacemos y del propio rodaje. Además, no conocía personalmente a ninguno de los invitados, así que tenía cierto miedo de que, por llevar invitados, tuviéramos que frenar el ritmo del rodaje y no pudiéramos llegar a los lugares que necesitábamos, pero se me fue en seguida. He alucinado con la predisposición y la entrega de todos. No ha habido ni uno que nos frenara. Incluso en jornadas durísimas, como una de ocho horas en el mar con un oleaje tremendo, Silvia Abril me decía: «venga, un poco más, a ver si encontramos algo». Me quito el sombrero.

Tiene pinta de haber sido un gran consumidor de documentales. ¿Qué tienen estos formatos para atrapar tanto? ¿Y qué aporta su programa al género?

Lo he sido, sí, y estoy muy agradecido y orgulloso de poder llevar algo relacionado con la naturaleza y los animales al prime time.
Creo que es necesario que la gente vuelva a conectar con lo que tenemos y, de hecho, me haría mucha ilusión que lo vean los niños, para que una nueva generación arranque con esa pasión. En este formato tocamos diferentes palos que pueden atraer a personas que quizá no son consumidoras habituales de documentales. Contamos el viaje, el proceso de conseguir la imagen, y aunque los protagonistas son los animales, la presencia del invitado añade un punto de conexión, acerca al espectador a lo que realmente se siente al estar frente a estos animales. Yo ya estoy acostumbrado, pero ver sus reacciones transmite de una forma muy auténtica lo que supone vivir algo así por primera vez.

Con todos los animales que ha capturado con su cámara. ¿Tiene aún alguna espinita, alguno que le gustaría conseguir?

La verdad es que me encantan todos, pero si tuviera que elegir una espinita, diría que me encantaría poder fotografiar una pantera negra. He estado muy cerca en lugares donde se han visto, pero nunca he tenido la suerte de encontrarme con una. Me haría muchísima ilusión, porque tiene algo místico, muy especial. En realidad no es una especie distinta, sino un leopardo con melanismo, y se dan muy pocos casos. Ver una salvaje en su hábitat sería un sueño.

Y si pudiese elegir a cualquier persona para que le acompañase en una de sus aventuras, ¿con quién se iría?

Pues me encantaría hacerlo con un referente de este mundo, de los amantes de la naturaleza, sobre todo para aprender y verla a través de sus ojos. Alguien como Jacques Cousteau o Félix Rodríguez de la Fuente. Me habría encantado conocerlos en persona y vivir una experiencia así junto a ellos, aprendiendo de su forma de mirar y de entender la vida salvaje.

Client Challenge