Warner Bros. Discovery y unas pérdidas de 9.000 millones

Warner Bros. Discovery (WBD) enfrenta un panorama financiero complicado, con un agujero significativo en su balance del segundo trimestre de 2024. La compañía ha reportado una pérdida neta de 10.000 millones de dólares, impulsada por una devaluación de 9.100 millones en sus canales de televisión. Esta situación ha sido atribuida a un “cargo por deterioro del fondo de comercio no monetario” y a una “discrepancia entre la capitalización de mercado y el valor contable”. Entre los factores que han afectado a WBD se encuentran un mercado publicitario debilitado en Estados Unidos y la incertidumbre en torno a futuros acuerdos de transmisión.

Una mala tasación devalúa su contenido

La pérdida reciente de los derechos de emisión de la NBA, un activo importante para la compañía, ha sido un golpe duro. WBD ha tomado acciones legales contra la NBA, argumentando que había igualado la oferta de Amazon por los derechos de transmisión y que, por lo tanto, la liga no podía rechazar su propuesta. A pesar de sus esfuerzos, la pérdida de estos derechos representa una parte significativa de la reciente devaluación de la empresa. Otro factor que ha contribuido a esta situación es la disminución de los ingresos publicitarios en sus redes lineales, afectando a canales como Discovery y Turner. Además, WBD informó de una reducción adicional de 2.100 millones de dólares debido a “amortización de intangibles relacionada con adquisiciones antes de impuestos, aumento del valor razonable del contenido y gastos de reestructuración”.

En medio de estas dificultades, el segmento de streaming de WBD ha mostrado signos de recuperación, con un aumento de 3,6 millones de suscriptores en plataformas como Max, HBO y Discovery+, alcanzando un total de 103,3 millones de suscriptores. Sin embargo, el segmento directo al consumidor reportó una pérdida de 107 millones de dólares. Desde su fusión en abril de 2022, las acciones de WBD han caído casi un 70%, con una reciente caída adicional del 8% tras el cierre de las operaciones, acercándose a un mínimo histórico. A finales de julio, la empresa consideró la posibilidad de escindir su estudio de cine y televisión de sus canales de televisión lineales, una medida que podría aliviar parte de su deuda de 40.000 millones de dólares, pero que también conlleva riesgos significativos.