En el corazón de «Reina Roja»

El universo de Antonia Scott está a punto de estallar. El próximo 29 de febrero Amazon Prime Video estrenará «Reina Roja», la adaptación a serie de la primera parte de la trilogía de Juan Gómez Jurado (con «Loba Negra» y «Rey Blanco»). Desde su lanzamiento, el próximo 29 de febrero, sus siete episodios estarán disponibles en 240 países y territorios de todo el mundo, y estará protagonizada por Vicky Luengo («Antidisturbios») y Hovik Keuchkerian («La casa de papel»). Koldo Serra («Sin huellas») es el director principal junto a Julián de Tavira («Hernán»), que firma los episodios 4 y 6. La serie es un thriller que narra la vida de Antonia Scott, una joven con un cociente intelectual de 242, oficialmente la persona más inteligente de la Tierra, que formó parte del experimento policial secreto «Reina Roja», pero todo acaba torciéndose y acaba perdiéndolo todo. Cuando el hijo de una poderosa magnate aparece asesinado grotescamente en su mansión, y la hija del hombre más rico de España es secuestrada, la organización Reina Roja se pone en marcha. Mentor, antiguo jefe de Antonia, recurre a Jon Gutiérrez, un policía vasco y temperamental a punto de ser expulsado del cuerpo, para reactivar a Antonia. El retorcido juego del gato y el ratón en el que se ven envueltos Jon y Antonia durante su investigación les servirá también para descubrir que se admiran y complementan mutuamente casi tanto como se irritan. Reina Roja es un thriller inquietante y diferente, en el que la ciudad de Madrid es una protagonista más, y que combina la urgencia y acción de la investigación con la jugosa y guasona química de sus dos protagonistas.

Colorimetría

En noviembre de 2022, tuvimos la oportunidad de una inmersión profunda a los escenarios donde se rodaron algunas de las escenas más importantes de la serie y pudimos charlas con el director y sus dos protagonistas. De antemano avisar de que el despliegue técnico de esta serie es muy importante. Han sido más de cinco meses de rodaje, que comenzó el 16 de agosto de 2022 y continuó en el centro de Madrid, en varios puntos emblemáticos de la capital como el pasadizo de San Ginés, la Plaza de España el barrio de Lavapiés, la plaza de Oriente, el palacio de Cristal y las estaciones de metro de Chamberí, Noviciado, Chamartín y Goya. Los responsables aseguran que salvo determinadas escenas, «no es una serie de plató», y disfrutamos de los diseños de producción de la mano del propio Antón Laguna, situados en una enorme nave en la que también descubrimos algunos secretos de la mano de la showrunner, Amaya Murizábal. El set representaba, entre otras cosas, el exterior iluminado de neón y el interior de la casa de Antonia Scott, con su escalera y rellano y las imposibles alcantarillas bajo la ciudad que ocultan la guarida del secuestrador. Durante la visita, Laguna y Muruzábal insisten en que la serie «no es un thriller, pero decimos siempre que Jon y Antonia son como Quijote y Sancho y si viviera Cervantes, hubiera hecho thriller». Para la showrunner «Reina Roja, «es una historia de amistad absoluta e idealismo; sanchificación de Quijote y quijotización de Sancho». Que la trama no nos engañe: «Lo entretenido de la acción oculta una historia humana y habla mucho del corazón humano».

En casa de Antonia todo es de un rojo embriagador y la única luz que entre es la de dos focos cenitales y un exterior de croma azul que en postproducción simulará el barrio madrileño de Lavapiés. Como veremos en la serie, la vida de Antonia es una sucesión de catastróficas desdichas y el tono rojo la acompaña muy bien. Tanto como el claustrofóbico laboratorio donde se llevaron a cabo los experimentos que alumbraron a «Reina Roja», y que posee hasta los detalles más increíbles como todo tipo de material de laboratorio etiquetado y a la vista. Toda esta calidad se traslada a la pantalla con la visión de Koldo Sierra, que según Amaya, «es un director preciosista, intencional, limpio y que genera un lenguaje cinematográfico que incluye diferentes tonos, y una elegancia europea, mezclada con el mundo del cómic y un pie en el realismo». Para todo el rodaje se estableció una colorimetría (influencia de Krzysztof Kieslowski), que se considera un «elemento narrativo», alejándose de lo nórdico, con un Madrid de cielo azul y todos los colores más saturados: ocres, verdes...

Una de las recreaciones más increíbles de todo el set, es aquel que imita a la perfección los pasillos alcantarillados de los túneles a la altura del Metro de Madrid. Largos pasillos angostos y sucios dan paso a una serie de celdas llenas de tuberías, grilletes, camas e incluso un set completo de maquillaje y peluquería. Al fondo una guarida con letras mayúsculas en la que hay todo tipo de objetos retro, mapas antiguos de Madrid, periódicos viejos y un gran tablero que no tiene nada que envidiar a los de la Policía. La serie sorprenderá gratamente a los fans de Gómez Jurado, que ha estado detrás del proyecto, y de aquellos que se acercan por primera vez al universo de «Reina Roja».