Telecinco transforma "Babylon Show" en busca de salvación

"Babylon Show" vivió el pasado lunes uno de sus momentos más difíciles en Telecinco, tras experimentar una caída constante en audiencias desde su estreno en agosto. Para evitar el hundimiento, el equipo de Carlos Latre apostó por una transformación del formato, acercándolo más a un magacín con dos mesas de tertulia diferenciadas. Sin embargo, ni el cambio de estrategia ni los invitados lograron frenar la sangría, dejando al programa en un modesto 3,1% de share frente a competidores como "El Hormiguero" y el recién estrenado "La Revuelta" de RTVE.

El primer bloque de la noche fue una entrevista centrada en el mundo del fútbol, con el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, y los jugadores Koke y Marcos Llorente como protagonistas. En lugar de optar por el tono cómico y desenfadado que caracterizó las primeras emisiones, Latre dirigió una tertulia más seria sobre la actualidad del club y LaLiga, sin los gags que sorprendieron en programas anteriores. La ausencia de esa chispa inicial hizo que la conversación no destacara frente a la oferta de la competencia, dejando una sensación de que el programa aún busca su verdadera identidad.

Después del espacio futbolero, el show cambió de tercio con una mesa de debate dedicada al fenómeno de "Gran Hermano". Con la reciente vuelta del reality a la parrilla de Telecinco, el programa se aferró a este éxito para intentar captar al público. Para ello, reunió a colaboradores como Xavier Sardá, Josie, Marta Torné y los exganadores Ismael Beiro y Fresita. Aunque hubo algún momento de humor con la imitación de Isabel Díaz Ayuso por parte de Leonor Lavado, el segmento no consiguió elevar los números ni despertar el interés esperado, a pesar de la promesa de imágenes exclusivas del reality.

Con un formato que aún no logra definirse ni conquistar a la audiencia, "Babylon Show" cerró la noche sin grandes sorpresas. Sardá fue el encargado de despedir el programa con la esperanza de que las próximas emisiones logren mejorar la situación: "Mañana queremos que esto sea tremendo", dijo, dejando en el aire la incógnita sobre lo que está por venir. Mientras tanto, el futuro del programa sigue siendo incierto, con Telecinco buscando una fórmula que funcione en una franja horaria cada vez más competitiva.