Inesperada noticia

Enrique Ponce se retira de los ruedos de manera indefinida

Repentina noticia tras actuar en León ayer y mañana estar anunciado en Burgos

A pocas horas de hacer el paseíllo en Alicante, Castellón y por último ayer en la plaza de toros de León, donde toreó con El Fandi y Pablo Hermoso de Mendoza y abrió la Puerta Grande, con un breve comunicado el matador de toros Enrique Ponce ha decidido informar sobre su retirada de los ruedos “de manera indefinida”.

“A quienes durante más de 3 décadas me han acompañado:

Lo primero que quiero deciros es GRACIAS por su cariño y apoyo incondicional, en especial durante este último año de pandemia en el que decidí defender la tauromaquia, tirar para adelante y devolverle al mundo del toro lo mucho que me ha dado.

En este momento de mi temporada taurina 2021 he decidido hacer un alto en el camino y retirarme por tiempo indefinido”.

El diestro Enrique Ponce, en su última tarde en León, ayer
El diestro Enrique Ponce, en su última tarde en León, ayerJ. CasaresEFE

El diestro estaba anunciado mañana en la plaza de toros de Burgos, junto a Andres Roca Rey y Emilio de Justo para dar cuenta de una corrida de Torrealta.

Será el diestro Diego Urdiales quien hago el paseíllo en su lugar.

30 años de alternativa

Enrique Ponce hace así una parada en un larguísimo camino, después de tres décadas de trayectoria. Los 30 años que quiso celebrar el año pasado en la Feria de Fallas y no pudo por la pandemia de la Covid. Fue en 16 de marzo cuando se convirtió en matador de toros aquel novillero de Chiva. Había debutado ante el público en la plaza jiennense de Baeza, el 10 de agosto de 1986. Tenía 16 años y muchas ganas de triunfar ya que desde los 10 años se había dedicado al toreo en la Escuela Taurina de Valencia.

Reconocido por batir distintos récords, entre ellos haber toreado desde 1992 al 2001 un mínimo de 100 corridas al año, llegando a su máximo en 1995 cuando realizó 120 corridas (174 orejas y 11 rabos). El matador también ostenta el record de más toros indultado llegando a un total de 49.

Fue un 16 de marzo la tarde en la que Ponce se convirtió en 1990 en matador de toros en Valencia. Lo hizo de manos de Joselito y en presencia de Litri. Desde entonces, sin descanso, se ha mantenido en la cima. Y ni tan siquiera en el complicado 2020, el año de la pandemia, cejó en el empeño de hacer campaña. En América, donde ha viajado muchos inviernos, es un ídolo.

Las Ventas

En la Monumental de Las Ventas ha cosechado a lo largo de su carrera cuarto Puertas Grandes, la última en la feria de 2017.

Ayer toreó en León su última tarde saliendo por la Puerta Grande y el día anterior hizo el paseíllo en la feria de Castellón. Sin previo aviso y ante la sorpresa generalizada del sector, Enrique Ponce dice que se va por “tiempo indefinido”. Y así será después de tres décadas pisando todas las ferias.