Toros
Una profesión que no es de este mundo
Borja Collado cortó la única oreja en la segunda y última novillada de Fallas, resultando cogido al igual que Diego San Román
Se cerró el cupo novilleril de la presente edición del serial fallera y tras el festejo de ayer cabe sacar varias conclusiones: que ser torero es algo muy difícil -siempre se ha dicho que serlo es imposible y llegar a figura es un milagro-, que quienes se dedican a esto están hechos de una pasta especial y que la cantera valenciana sigue funcionando. El trabajo que se realiza desde la Escuela Taurina local -72 funciones organizó el curso pasado para sus alumnos, que se dice pronto...- se está evidenciando positivo y fructífero y los dos novilleros de la tierra que ayer se presentaron en el coso de Monleón dejaron claro que son carne de futuro.
Fue esta tercera entrega del abono de Fallas un espectáculo tan accidentado como emocionante. Dos de los actuantes acabaron en la enfermería, un novillo se rompió una pata, hubo caballos de picar que fueron por el aire... pero también se vio a chavales que quieren ser toreros y que, visto lo visto, pueden serlo a poco que las cosas no se tuerzan.
Borja Collado, uno de los dos valencianos debutantes, se llevó la única oreja de la tarde. Variado y vistoso con el capote, no perdonó quite y se lució al torear de capa a los dos novillos de su lote. Fue una pena que su primer oponente se partiese la mano izquierda apenas comenzada la faena a de muleta. Con bien criterio buscó la espada de verdad y acabó pronto con el sufrimiento del animal.
Se fue a porta gayola a recibir al quinto, un ejemplar cuajado y muy vivo que derribó en varas. El novillero de Torrente se mostró muy firme y sereno, ligando los muletazos, aunque no todos le salieron limpios, en tandas largas y bien rematadas. Faena la suya de plantas firmes y valor de verdad, llevando siempre muy toreado a su oponente, como si no fuese esta la segunda novillada que mata. Citó a recibir y no se enmendó cuando el de El Parralejo hizo por él, dejando un bajonazo definitivo y llevándose una palizón tremendo del que tuvo que ser asistido en la enfermería.
También Miguelito anduvo sereno y rodado, muy tranquilo y maduro. Logró fijar pronto a su primero, desentendido de salida, dejando muletazos con buen gusto y detalles de torería en un trasteo basado en la mano diestra. El cuarto dio hasta tres volteretas girando sobre sí mismo, lo que acabó acusando en el último tercio, pese a lo cual su matador se empeñó en rebañar un ramillete de muletazos con ligazón.
Con el que mató en lugar del herido San Román derrochó decisión y ganas y puso la plaza boca abajo con las tres largas de rodillas con que recibió a su primero, al que sacó varias tandas limpias y templadas e impidiendo que el astado se rajase, aguantándole en los medios.
De la disposición con que vino el mejicano Diego San Román sólo hay que hablar de las ceñídisimas gaoneras con que saludó al que abrió plaza y de la serie de derechazos rodilla en tierra con que inició su faena. Luego se llevó un pitonazo en el gemelo derecho , lo que hizo que su trasteo no acabe de cuajar con un antagonista que pedía las cosas muy bien hechas.
Valencia, 12 de marzo. Tercera de feria. Un tercio de entrada.
Novillos de El Parralejo, bien presentados, con poder y de buen juego.
Diego San Román (de gris perla y oro), tres pinchazos, aviso, descabello, ovación. Fue cogido por este novillo y no pudo continuar la lidia.
Miguel Senent “Miguelito” (de rojo y oro), pinchazo, entera, vuelta al ruedo; tres pinchazos, aviso, descabello, silencio; en el que mató por San Román, pinchazo y media, ovación.
Borja Collado (de buganvilia y oro), pinchazo, entera y descabello, palmas; bajonazo, oreja.
De las cuadrillas saludaron Raúl Martí y José Arévalo.
PARTE MÉDICO DIEGO SAN ROMÁN
Durante la lidia al primer novillo ha ingresado en esta enfermería el novillero Diego San Román el cual presenta herida por asta de toro en borde del tercio medio proximal en pierna derecha y que atraviesa piel, tejido celular subcutáneo y fascia gemelar superficial con una trayectoria descendente de 9 cm y otra ascendente de 7 cm. No afectatación vascular ni nerviosa. Se interviene bajo anestesia local, realizándole Friedrich de los bordes de la herida y tejido desvitalizado. Cierre por planos dejando un drenaje de Penrose. Se realiza vendaje compresivo.
Pronóstico: Reservado
PARTE MÉDICO BORJA COLLADO
Durante la lidia del 5º novillo ha ingresado en esta enfermería el novillero Borja Collado el cual presenta cornada envainada de 10 cm de profundidad y 6 cm ascendente en región anteromedial tercio medio próximo muslo izquierdo diametralmente distal pliegue inguinal con masa tumoral. Se interviene bajo anestesia local y sedación. Se practica drenaje del hematoma.
Pronóstico: Reservado
✕
Accede a tu cuenta para comentar