Energía solar

«El pequeño productor de energía fotovoltaica se siente desamparado por el Gobierno»

Miguel Ángel Martínez-Aroca, Presidente de ANPIER (Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica), reclama al Ejecutivo que compense a las familias afectadas por los recortes a las renovables

Miguel Angel Martinez-Aroca, presidente de ANPIER
Miguel Ángel Martínez-Aroca, Presidente de ANPIER David JarLa Razón

ANPIER (Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica) representa y defiende los intereses de los pequeños y medianos productores de energía solar fotovoltaica y cuenta con más de 5.000 asociados. Su presidente, Miguel Ángel Martínez-Aroca, cuenta a LA RAZÓN la realidad de este sector, sus retos y problemas.

¿Cómo describiría la situación actual de la energía fotovoltaica en España?

España es líder mundial en generación de energía fotovoltaica por habitante a nivel mundial tanto en extensión, número de habitantes y potencia instalada. Gracias a una apuesta del Gobierno de Rodríguez Zapatero, en 2007, se apostó por la fotovoltaica como protagonista de la transición energética hacia las energías renovables. Así se posicionó nuestro país como líder mundial y se dio entrada a 65.000 familias generadoras de energía solar, construyendo los primeros 3.500 megavatios de potencia con una inversión de 25.000 millones de euros en apenas un año. Fue una historia de éxito que sufrió un parón en 2012.

¿Qué ocurrió en aquel año?

El nuevo Gobierno de Mariano Rajoy decidió parar en seco el desarrollo de las energías renovables aplicando una serie de recortes retroactivos que seguimos arrastrando hoy porque no ha habido una solución política. Los fondos de inversión también los sufrieron, pero ellos han podido recurrir a la vía internacional a través del Banco Mundial, que está emitiendo laudos condenando al Estado español a pagar indemnizaciones multimillonarias. Los pequeños productores han llegado hasta el Tribunal Supremo y este ha eximido al Estado del pago de cualquier tipo de indemnización. Si el actual Gobierno no resuelve esta cuestión, esperamos y confiamos en que el próximo ejecutivo que salga de las urnas sea el que ponga fin a este problema tan grave.

¿Cómo ha afectado esta situación al desarrollo de la energía fotovoltaica en nuestro país?

Pese a ello, el desarrollo de nuevas plantas que venden su energía directamente al mercado sigue creciendo y España vuelve a ser líder mundial. En este escenario, se conforma una tipología de pequeñas plantas originarias que conviven con grandes parques solares. Se proporciona mayor protagonismo, cobertura y promoción a este tipo de macro central con los perjuicios medioambientales que conlleva. Esta situación ha hecho muchísimo daño a la promoción y desarrollo de pequeñas unidades solares y del autoconsumo.

¿Qué queda de aquellas 65.000 familias y qué aportaron a este sector?

Con los nueve cambios normativos retroactivos que se produjeron en el sector, muchas vendieron a fondos de inversión al no conseguir la refinanciación de los bancos. Todavía podemos decir que hay una masa social de 50.000 familias originarias. A ellas debemos el abaratamiento del precio de la energía y de todos los componentes, que han sufrido un descenso en costes del 90% respecto a los precios del año 2008.

¿Puede explicarnos qué papel representan los pequeños productores en este sector?

Son indudables los beneficios de un modelo más pequeño de productor. Tiene menos impacto medioambiental, mejor consenso de los pueblos porque está anclado al territorio, evacua en líneas ya existentes y no tiene que construir nuevas redes, se redistribuye la riqueza, genera más mano de obra y tributa allí donde tiene el terreno porque, en general, es una empresa española. Estamos regalando un activo, que es el sol de nuestro país, y la evacuación disponible en las redes pagada por todos los españoles a los titulares de grandes plantas. Pedimos al Ministerio de Transición Ecológica que reserve un 20% de potencia a iniciativas más pequeñas y sostenibles, que vele por un mercado con pequeños y medianos empresarios y el menor número posible de parques de gran tamaño por los perjuicios que suponen.

¿Qué soluciones propone ANPIER?

En el acuerdo de Gobierno con Unidas Podemos, en el apartado 3.5 se comprometen a reparar el daño causado a los pequeños productores fotovoltaicos y lo están incumpliendo. Es urgente cerrar la herida y que se comunique a la sociedad. El pequeño productor está desamparando y compite en igualdad de condiciones con grandes empresas. Hay que compensar parcialmente a estas familias pioneras y se puede hacer extendiendo 6 años más el derecho a percibir una retribución, que es de 30.

En el contexto actual de descarbonización de las energías, ¿qué rol juega la pequeña producción de energía fotovoltaica?

Es el papel más importante, pues refuerza las redes al existir muchas unidades en un mismo entorno. La gran planta necesita transportar la energía a largas distancias construyendo redes con gravísimos impactos. Por otro lado, hay un gran descontrol de la potencia en España. Echamos de menos un capitán que gobierne la transición energética. No se está incrementando la demanda de energía y, sin embargo, se está haciendo un llamamiento a una inversión en renovables muy importante que va a hacer que haya más oferta de energía en el mercado sin que, además, haya un calendario de cierre de centrales nucleares.