La productividad por empleado en España, en el mismo nivel que hace 30 años

La productividad por empleado en España se encuentra prácticamente en el mismo nivel que hace 30 años. El analista y estadístico José Ignacio Crespo atribuye este mal comportamiento a que el empleo está creciendo a mayor velocidad que el Producto Interior Bruto (PIB). Y es que desde 1995 la primera variable ha aumentado un 21,8%, mientras que la segunda lo ha hecho en un 15,2%. "Eso computado desde 2015 lleva a una caída de la productividad por empleado del 5,44%", calcula. Una mala evolución que se ha agravado en 2023. Y es que en los tres primeros trimestres del ejercicio pasado, el empleo creció el triple que el PIB.

Pero el matemático no es el único que ha realizado un análisis sobre la evolución de la productividad en las últimas décadas. Caixabank Research indicaba en uno de sus últimos informes que en los último 20 años la brecha en relación a nuestros vecinos comunitarios apenas ha variado. Así, en 2022, el PIB nominal por hora trabajada era un 76% del valor registrado en la eurozona, y solo el 63% de Alemania. En 2000, el PIB por hora trabajada era un 75% del valor del conjunto de la zona 61% con respecto al motor de la economía europea.

Por su parte, la productividad de las pymes españolas cayó un 0,9% en el periodo comprendido entre junio y septiembre en relación al mismo mes de del año anterior, según el Indicador Cepyme sobre la Situación de las Pymes Españolas. La organización constata un retroceso de la productividad del 1% con respecto a 2019 y del 4,7% en comparación con 2011.

Este descenso de la productividad contrasta con el fuerte aumento que han tenido los costes laborales. Según la última encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondiente también al tercer trimestre de 2023, el desembolso por trabajador se situó en 2.892,73 euros al mes, un 5% más que en el mismo periodo de 2022. Así, el coste salarial aumentó un 4,2% (2.227,80 euros), disparándose los costos no salariales un 7,2% hasta 774,93 euros. A esta fuerte subida, ha contribuido, entre otras cosas, la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que ha aumentado más de un 30% (descontando el efecto de la inflación) en los últimos cinco años.

De esta forma, España se sitúa como uno de los países de la OCDE menos productivos, algo que contrasta con la evolución de países de nuestro entorno, como Irlanda que, actualmente, encabeza la mayoría de la clasificaciones que miden el rendimiento de los trabajadores.