Viajes

Bilbao, la perfecta fusión entre tradición y modernidad

Actualmente es una de las ciudades más cosmopolitas del mundo

Mirador de Artxanda
Mirador de ArtxandaFotografía Maica Rivera

«El mundo entero es un Bilbao más grande» es uno de los versos que le dedicó el escritor bilbaíno Miguel de Unamuno a una ciudad en constante evolución hasta llegar a ser, hoy en día, una urbe a la vanguardia sin renunciar, por ello, a sus tradiciones y a la esencia de su pasado histórico.

La ría de Bilbao, un recorrido por sus edificios más emblemáticos

Bilbao, o Bilbo en euskera, es conocida por su reconversión urbanística, dejando de ser una ciudad dedicada a la industria para convertirse en una de las urbes más cosmopolitas y sostenibles del mundo. Hasta ella acuden una infinidad de viajeros atraídos por su cultura, su paisaje y sus edificios más significativos, de los que destacan, entre otros muchos, los situados a la orilla de la ría de Bilbao, también llamada ría del Nervión, que, además de dividir a la ciudad en dos, constituye su arteria principal. Siguiendo el paseo de la ría, pueden verse construcciones tan emblemáticas como el Mercado de la Ribera, que en 1990 se catalogó como el mercado cubierto más grande de toda Europa; la estación de Santander «La Concordia», cuya visión hace palidecer todo a su alrededor; la imponente Torre Iberdrola, diseñada por el arquitecto Cesar Pelli, y el Palacio Euskalduna, construido sobre el solar de los antiguos astilleros Euskalduna y que rinde, con su peculiar forma de barco, homenaje al pasado industrial de la ciudad.

En este recorrido merece una mención especial el museo Guggenheim, una construcción única por sus formas curvilíneas y orgánicas, cuyo acabado lo conforman alrededor de 33.000 planchas de titanio que cambian de tonalidad según el momento del día y las condiciones meteorológicas. Diseñado por el reconocido arquitecto Frank Gehry y construido entre 1993 y 1997, es el monumento icónico de la ciudad por plasmar, en un singular edificio, la modernidad de la ciudad. El perro Puppy, de Jeff Koons, y la araña de acero, de Louise Bourgeois, dan la bienvenida a este museo cuyas exposiciones brillan por su calidad artística e invitan a disfrutar de una urbe que ofrece arte, modernidad y, cómo no, gastronomía.

Museo Guggenheim
Museo GuggenheimFotografía Maica Rivera

Bilbao, destino gastronómico por excelencia

Con la barandilla roja de Bilbao y la ciudad a sus pies, el mirador en el monte Artxanda permite contemplar desde lo alto una ciudad que, además de todo lo anterior, cuenta con una gastronomía exquisita para deleitar los paladares más exigentes. En la capital vizcaína, considerada uno de los templos de la cocina vasca, está muy arraigada la cultura del pintxo-pote, o tapeo, por lo que en sus bares se pueden probar desde los pinchos más tradicionales hasta los más vanguardistas, haciendo de la cata de estas delicias culinarias toda una experiencia gastronómica. Por otro lado, aquí nacieron afamadas elaboraciones como el bacalao a la vizcaína, el pisto a la bilbaína o la deliciosa merluza ondarresa, por mencionar solo algunos. Degustar estos platos después de ver su Casco Viejo —uno de los espacios con más encanto de la metrópoli—, y su Plaza Nueva, o tras adentrarse en lugares tan interesantes como el Museo de Bellas Artes de Bilbao y el Teatro Arriaga es la mejor forma de concluir una visita a esta ciudad reconvertida en un referente turístico, cultural y gastronómico.

Visitar Bilbao es, en definitiva, respirar la historia y la cultura vasca, ver in situ cómo una ciudad se ha redescubierto a sí misma para transformarse en un destino único, en el que caminar por sus calles, disfrutar de su arte y degustar su gastronomía se convierten en experiencias que se quedan grabadas en la memoria de cualquier viajero.