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El encanto de Guadalajara en otoño: un viaje a la magia de la capital alcarreña

Durante octubre y noviembre, la ciudad cobran vida de la mano de las Jornadas Mendocinas, el Tenorio Mendocino o los Ciclos de Música Antigua y Guadalajara a la luz de las velas

Guadalajara
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Guadalajara es el destino ideal para disfrutar de una escapada otoñal. Una ciudad muy cómoda para recorrer a pie, ofreciendo numerosas propuestas culturales, de ocio y gastronómicas para todos los públicos.

Así, la capital alcarreña ofrece una experiencia turística completa y única: el Palacio del Infantado, con su majestuoso Patio de los Leones y el Museo de Guadalajara, residencia de la familia Mendoza durante siglos. La Capilla Luis de Lucena, una auténtica joya manierista, la pequeña Capilla Sixtina; la Cripta de los Mendoza, situada bajo el ábside de la Iglesia de San Francisco, que guarda un gran parecido con la cripta de los Reyes de El Escorial, o el Palacio de Antonio de Mendoza, una de las primeras muestras de arquitectura renacentista en Castilla.

Tampoco se puede dejar pasar la oportunidad de visitar el Palacio de la Cotilla, también conocido como el Palacio de los Marqueses de Villamejor. En su interior alberga una joya única, como es la Sala chinesca de té, decorada con papel de arroz, una de las dos únicas estancias que se conservan en España de estas características.

Una de las maneras más cómodas de visitar la ciudad es hacerlo de la mano de uno de sus guías turísticos habilitados, tomando parte del servicio de visitas turísticas que se realizan todos los sábados, domingos y festivos del año. Con salida desde la céntrica Oficina de Turismo Municipal, ubicada en la plaza del Concejo, por tan solo cinco euros (Guadalajara Card incluida) es posible disfrutar de un recorrido interpretado por la historia y patrimonio artístico de la capital.

Tras la visita turística son muchas las cosas que quedan por hacer. La primera de ellas es disfrutar de una amplia oferta gastronómica en uno de sus muchos establecimientos hosteleros. La cocina tradicional da paso a una cocina cada vez más creativa, una explosión de sabores para los paladares más exquisitos. El recetario alcarreño ofrece platos castellanos, tradicionales y sencillos, reflejo de las condiciones naturales de vida de estas tierras. Especialidades gastronómicas de la casa son: la sopa de ajo, las migas, las gachas, las judías al arrope, los tradicionales asados de cordero y cabrito, la trucha y las setas. De postre, el producto estrella de la capital alcarreña, los bizcochos borrachos; y la miel, que aporta su sabor a numerosas recetas.

En lo que a cultura y ocio se refiere, hay varias citas imperdibles en esta temporada otoñal. Cerca de la festividad del día de Todos los Santos (este año, los días 1 y 2 de noviembre), las calles y sus edificios mendocinos se engalanan para recibir la representación, a cargo del grupo Gentes de Guadalajara, de la función más conocida de Zorrilla «Don Juan Tenorio», congregando a multitud de oyentes hasta altas horas de la madrugada.

Como antesala a esta cita cultural, los días 26 y 27 de octubre, todos los visitantes podrán disfrutar en Guadalajara de las Jornadas Mendocinas, recorridos guiados gratuitos que incluyen pequeñas escenas teatralizadas.

Los Ciclos de Música Antigua y Guadalajara a luz de las velas ofrecen la posibilidad de disfrutar de la música en directo en escenarios incomparables como son los diferentes monumentos de la ciudad, viniendo a completar una nutrida programación para el último trimestre del año.

Cementerio Guadalajara
Cementerio GuadalajaraLaRazón

Otoño en familia

También son múltiples las alternativas que se ofrecen en el ámbito turístico para las familias. Desde talleres a visitas guiadas adaptadas a todas las edades, todas ellas actividades gratuitas, pasando por una gymkhana autodirigida sobre la Guadalajara medieval «La espada de Álvar Fáñez» o la propuesta digital «El tesoro del Cardenal Mendoza».

También merece mucho la pena visitar el Zoo municipal, importante centro de recuperación de especies autóctonas, que pone en libertad a los animales una vez que han superado su período de mejoría. Después, es una buena opción dar un paseo por la cercana ribera del Río Henares, donde con la caída de las hojas el paisaje se llena de colores cálidos, naranjas y amarillos, característicos de esta época del año.

En definitiva, una ciudad muy próxima y bien comunicada, ideal para perderse entre sus monumentos, sus plazas, su gente, sus parques, su cultura… Un destino único, lleno de historia, arte, fiesta y tradición. Guadalajara es la escapada que el viajero necesita durante el otoño.