Puerto Antilla Grand Hotel: idilio familiar sin límites

Bañada por una luz tan especial que da nombre a su litoral, la costa onubense se presenta como un idílico rincón en el que desconectar del mundanal ruido en pleno verano y en familia. Aquí no hay problema para plantar la sombrilla en primera línea de playa ni hay que sufrir la crudeza del intenso calor estival, algo que se agradece cuando se viaja con niños. Si a eso se añade, además, un alojamiento especialmente pensado para las familias, como Puerto Antilla Grand Hotel, la ecuación resulta, simplemente, perfecta.

Habitaciones amplias y conectadas entre sí, instalaciones adaptadas para los más pequeños, restaurantes de primer nivel y enormes piscinas rodeadas de un frondoso jardín en el que resulta complicado sentirse agobiado son algunas de las características que marcan las diferencias en este alojamiento de cuatro estrellas que recientemente ha sido renovado. De hecho, tras un profundo proyecto de reforma acometido durante los últimos años, donde los propietarios han querido renovar su imagen colonial, todas las habitaciones han sido redecoradas y amoldadas a las necesidades de los viajeros.

En plenas vacaciones de verano, disfrutar de tiempo en familia se convierte en un verdadero regalo, sobre todo cuando ese tiempo es de calidad. Y eso se traduce en no tener obligaciones de deberes, ni prisas por llegar a tiempo al cole. Aquí la única tarea es la de exprimir al máximo cada minuto, derrochar risas y juegos en la piscina y dejar correr las horas tumbados bajo el sol con un cóctel en la mano.

Cuatro piscinas exteriores, una de ellas exclusiva para niños, hacen las delicias de grandes y pequeños. Aunque lo cierto es que aquí el entretenimiento está asegurado para todos. De hecho, mientras los peques juegan bajo la supervisión de monitores en el club infantil o en el jardín, los mayores pueden practicar pádel o recuperar fuerzas en el Prestige Club Sport Wellness & Spa, de 1.000 metros cuadrados, gracias a un completo circuito de aguas terapéutico, piscina climatizada, jacuzzi, sauna finlandesa, baño turco, ducha de cubo, ducha nebulizada, ducha corporal o ducha de aromaterapia, entre otras opciones.

Cocina gourmet al aire libre

El recuerdo de unas buenas vacaciones también se mide en el paladar, de ahí que Puerto Antilla Grand Hotel quede grabado en la memoria. No es para menos, pues la calidad de su gastronomía es muy destacable. El restaurante buffet Los Porches cuenta con una terraza donde poder comer al aire libre, además de contar con una cocina a la vista y una amplia variedad de platos, tanto de cocina nacional como internacional. Sin olvidarse de El Mirador de Puerto Antilla, un coqueto restaurante a la carta que propone una selección de platos basados en productos de la sierra y de la costa de la provincia de Huelva. Como colofón a la jornada, nada mejor que acabar el día disfrutando de un espectáculo musical o de una divertida función de magia en el gran salón. De nuevo, grandes y pequeños, todos contentos.