Rincones naturales para recorrer España

Aunque empieza a hacer más frío y ya caen las primeras lluvias de la temporada, eso no es excusa para quedarse en casa. Todo lo contrario, pues la llegada del otoño transforma nuestros campos en un cuadro digno de museo. Las tonalidades ocres, rojizas, verdes y mostazas invaden el horizonte hasta crear un colage que queda grabado en la retina y hace aún más bellos los destinos que visitamos. Ataviados de un buen chubasquero, botas cómodas y un gorro, el otoño se presenta como la época perfecta para redescubrir España a través de sus espacios naturales. Es la opción ideal para viajar en familia, pero sobre todo para disfrutar de actividades al aire libre, desconectar del mundanal ruido y romper con la rutina. Hay alternativas para todos los gustos y necesidades, ya que España puede presumir de esconder auténticos paraísos naturales en cualquier provincia que busquemos. Tan sólo hay que mirar el mapa y elegir:

Tajo internacional

Extremadura es una tierra que guarda secretos y lugares por descubrir a cada paso. La zona del Tajo Internacional es uno de éstos. Un espacio en el que encontrar historia, cultura, gastronomía y, sobre todo, naturaleza. Este territorio, ubicado al suroeste de la provincia de Cáceres, conserva un vasto legado histórico fruto de los pueblos que por él pasaron, como el magnífico puente romano de Alcántara de casi de 2.000 años de antigüedad. Pero dispuestos a disfrutar de la naturaleza, aquí hay mucho por hacer. Una de las maravillas que guarda esta zona es el Parque Natural Tajo Internacional. Gran parte de la superficie del parque coincide con otros dos espacios protegidos declarados Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), bajo la denominación común de «Río Tajo Internacional y Riberos». Vertebrado por el río Tajo, una de las particularidades de este Parque es su carácter internacional. Es un espacio que invita a disfrutar del senderismo en plena naturaleza, pudiendo observar las maravillas de su flora y fauna. Existen numerosas rutas de diferente dificultad y duración adaptándose a las exigencias de los visitantes. Dos de las más sencillas de realizar y de recorrido circular son la ruta del Molino de la Negra, en Valencia de Alcántara; y la del Mirador de Negrales, en Herrera de Alcántara. La observación de aves es otra actividad muy recomendable, en la que poder descubrir las más de 300 especies que han encontrado un refugio vital en el este ecosistema. El otoño e invierno son una de la mejor época del año para realizar esta actividad, porque es zona de paso de especies migratorias. Más información en www.turismotajo-internacional.com.

Parque nacional del Teide

Fuera de la Península Ibérica España también cuenta con rincones naturales únicos en el mundo. Buen ejemplo de ello es el Parque Nacional del Teide, ubicado en el centro de la isla de Tenerife y convertido en el auténtico icono tinerfeño, ya que se trata de la única zona de alta montaña subtropical de Europa. Esto hace que muchas de las especies animales y vegetales que viven aquí sean exclusivas. En 2007, la zona fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, gracias a sus impresionantes paisajes que lo han convertido en el Parque Nacional más visitado de Europa y el segundo del mundo. Recorrer la zona, incluso en coche, es todo un espectáculo. El paisaje es sobrecogedor se mire por donde se mire. Para conocerlo con mayor profundidad, lo mejor es subir por una carretera y bajar por otra. El mayor contraste se da entre las que llegan por el norte y las que lo hacen por el sur. Las Cañadas del Teide forman una gigantesca Caldera de unos 17 km de diámetro sobre la que se asienta el Pico del Teide, de 3.718 metros, que supone la mayor altura de España y el tercer volcán más alto del mundo. La nieve del pico junto a las coladas de lava que se derraman por sus laderas forman una combinación única durante el otoño. Una de la experiencias más excitantes es subir en el teleférico. El tránsito entre estaciones dura unos 8 minutos y la sensación es electrizante. Una vez finalizado el recorrido el viajero se encuentra con unas vistas extraordinarias desde el mirador. Más información en la página web www.webtenerife.com.

Valle de Arán

El Valle de Arán, con una superficie total de 633,46 kilómetros cuadrados, se encuentra en pleno centro de los Pirineos, al norte de Cataluña. Su ubicación lo convierte en el único valle atlántico de la cordillera española, lo que crea una gran variedad paisajística. Esta zona es perfecta para una escapada en familia, ya que cuenta con instalaciones como «Aran Park», situado en el Pòrt del Portilhon que permite el descubrimiento de la fauna y flora autóctona de los Pirineos, y el parque de aventura «Naturaran» con diferentes niveles de recorrido adaptados a todos los públicos. Más información en www.visitvaldaran.com.

Laguna negra

Además de albergar algunas de las masas forestales más importantes del continente Europeo, la provincia de Soria alberga parajes de montaña de gran belleza. Tal es el caso de la Laguna Negra, a la que se puede acceder desde la localidad de Vinuesa con coche, aunque los dos últimos kilómetros merece la pena hacerlos a pie. Esta oscura, fascinante y enigmática laguna, envuelta en leyendas, forma unos de los parajes más bellos de la provincia, pues está encajada a unos 2.000 metros de altura, entre paredes graníticas y bordeada por infinitos pinares, lo que da un aspecto oscuro y tenebroso. Muy próximo está el Cañón del Río Lobos, un paraje natural que no hay que perderse, ya que combina naturaleza e historia a la par. Y en otoño resulta imprescindible aprovechar la ocasión para disfrutar de Soria Gastronómica, una feria que se convertirá los días 27 y 28 de octubre en el epicentro de la gastronomía micológica. Más información en www.sorianitelaimaginas.com

Valle de Ordesa

El Valle de Ordesa es uno de los lugares más bellos y conocidos del Pirineo aragonés. Sus formas son únicas en toda la cordillera, ya que no es perpendicular sino paralelo a ésta. Es un destino ideal para los amantes de la bicicleta, gracias a proyectos como Tracks de Ordesa Pirineos, la nueva propuesta de Bikefriendly, el Sello de Calidad pionero especializado en cicloturismo. Teniendo como punto de salida y llegada la población oscense de Jaca, la opción BTT ofrece un recorrido de 246 kilómetros, la mayor parte de ellos por caminos y senderos, con un desnivel positivo acumulado de 7.400 metros. Por otro lado, la opción carretera comprende 564 kilómetros, con un desnivel acumulado de 10.984 metros.En cualquier caso, Tracks de Ordesa se encarga de adaptar el recorrido al nivel de cada ciclista, ofreciendo la posibilidad de realizarlo en dos, tres, cuatro y hasta cinco etapas, tanto de forma libre como en compañía de un guía. Más información en www.tracksdeordesa.com.

Parque natural Alcornocales

Con el otoño llega la berrea del ciervo, uno de los espectáculos más estremecedores que el viajero puede disfrutar en el Parque Natural de los Alcornocales, en la provincia de Cádiz. En esta zona hay cerca de 35.000 ejemplares de ciervos que se baten en una lucha sin cuartel por cubrir a las hembras. La berrea comienza con los bramidos y continúa durante varios días con la batalla en la que chocan sus astas hasta quedar exhaustos. El sonido envuelve el corazón del parque y sus ecos se escuchan en un entorno de varios kilómetros, especialmente al amanecer y cuando cae la tarde. Este fenómeno se alarga hasta bien entrado el mes de noviembre, por lo que se presenta como una excusa ideal para disfrutar de esta zona natural. Más información en www.tugasa.com.

Las Merindades de Burgos

Viajar hasta Las Merindades es introducirse en uno de los territorios con mayor personalidad e historia de la provincia de Burgos. Su encanto natural es enorme, ya que ésta es la comarca burgalesa más norteña, definida por un paisaje de montañas verdes y angostas que lindan con el Cantábrico. De ahí ese clima húmedo que permite conservar todo un ecosistema donde flora y fauna conviven en perfecta armonía. Es el caso de Sierra Salvada, donde destaca el monumento natural del Monte de Santiago dominado por un frondoso hayedo que llega hasta un espectacular anfiteatro rocoso por el que, en épocas de fuertes lluvias, se precipita en una cascada de casi 300 metros de altura. Uno de los vestigios históricos más destacados y de mayor reclamo que se conservan en Las Merindades es el complejo kárstico de Ojo Guareña, un monumento natural de casi 100 kilómetros de extensión que es uno de los pocos lugares del mundo en donde se puede seguir con claridad la evolución de la religión desde el Paleolítico hasta nuestros días. Esta gran gruta está considerada como el conjunto de cuevas más extensas de la Península Ibérica y entre las diez mayores del mundo. Más información en www.turismoburgos.org.

Sierra de Guadarrama

A tan sólo 47 kilómetros de Madrid el viajero tiene a su disposición un refugio natural de gran valor. Se trata de la sierra de Guadarrama, declarado Parque Nacional por ser un privilegiado refugio de biodiversidad. En su medio físico destacan sus circos y lagunas glaciares y sus roquedos graníticos; entre sus paisajes vegetales, los ecosistemas de alta montaña y los extensos pinares de pino albar. El recién inaugurado Centro Medioambiental El Gurugú debe ser el primer alto en el camino para iniciar este viaje. Más información: www.cinsierradeguadarrama.com.

Las Bárdenas Reales

Al sur de la Comunidad Foral, la Ribera acoge uno de los grandes tesoros naturales de Navarra: las Bardenas Reales. Las 42.500 hectáreas de este territorio con apariencia casi desértica y lunar, declarado Parque Natural y Reserva de la Biosfera, hacen de este enclave el lugar idóneo para perderse y disfrutar de sus insólitos paisajes en otoño, ya sea a pie, en bicicleta, a caballo o con vehículos a motor por las zonas señalizadas. Hay actividades organizadas que permiten al viajero descubrir la zona con guías y de forma muy entretenida tanto para niños como mayores. Más información en www.turismo.navarra.es.

Chinchón

Chinchón, ciudad de marcada personalidad del sur de la Comunidad de Madrid, es una escapada perfecta en el otoño, ya que conserva su peculiar singularidad enclavado en medio de la vega de Tajuña, con sus paisajes pardos, grises y ocres. Racimos de casas agrupadas en torno a su majestuosa Plaza Mayor, denominada como la cuarta maravilla material de Madrid, que conforman las callejas llenas de vida del casco antiguo y que merece la pena descubrir. Y ya que estamos, resulta obligado sentarse a la mesa de alguno de sus buenos restaurantes para disfrutar de su cocina tradicional. Más información en www.ciudad-chinchon.com.